Hola gente hermosa que me ha seguido y ha seguido esta historia que apenas esta iniciando -baja de las escaleras y hace poses de divas.
Bien ahora mi gente quiero que me perdonen por no haber actualizado, he estado ocupada estas fechas debido a los exámenes finales de la universidad, la comida para el 24, que los regalos y que lo del 31 y así, pero mis queridos chibis-chan Ahora quiero darles un regalo de navidad atrasado.
Cave aclarar que esto no es parte de la historia, vendría siendo un one-shot, el cual se dividirá en dos partes pues es muy largo.
Espero que les guste y el siguiente capítulo será publicado el 31 de diciembre.
Creo
Muy bien, producción todos a sus puestos.
Escena 45 toma 6.
Acción.
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-¡Ya llego! ¡Ya llego! -Un doncel de 14 años bajaba por las escaleras de su cada junto a su hermano mayor kora, un varón de 16 años, ambos se encontraban sumamente felices ¿la razón?
Su tío favorito había llegado.
Kagetora aida,un hombre que era conocido por ser un gran mago y el fabricante de juguetes en el país, junto a él estaba su hija; aida riko quien en sus manos poseía una gran caja llena de novedades y sorpresas para sus primos.
-Un gusto volver a verte hermano - dijo una mujer castaña junto a un hombre peli-negro: zero y hana Furihata eran los padres que la mayoría le encantaría tener, unas personas honradas, amables y solidarias personas capaces de sacar una sonrisa a cualquier persona pero con un serio problema de sobre protección hacia kouki.
-Igualmente mi querida hermana, zero nos volvemos a ver - ambos hombres se dieron un amistoso abrazo mientras hana abrazaba a la castaña menor.
-¡tío kagetora! ¡Aida-chan! -Sin dar oportunidad, el pequeño castaño se abalanzó sobre ellos en un gran abrazo de oso, el cual le saco una carcajada a el hombre y una risa a la chica.
-Kouki, estas dejando sin aire a tío kagetora y a aida - al escuchar eso el doncel los soltó y realizó una reverencia exagerada logrando hacer reír a kora - kouki, eres un idiota.
- ¡Kora-nii, no soy idiota! - Ambos hermanos comenzaron a pelear hasta que la pelea fue detenida por el padre de riko.
-Ya basta mis niños, no peleen ¿de acuerdo? -Al recibir la afirmación a la orden de parte de ambos kagetora sonrió para luego dirigirse a la castaña- aida, hija Porfavor la caja.
La castaña abrió la caja y de ella salio una muñeca bailarina, un soldado de juguete y un oso polar con su cría, quienes comenzaron a realizar un show para los menores. Kouki quería quedarse con el soldado,pero su madre le explico que era imposible.
-Pero mamá, yo lo quiero -dijo observando al soldado con ilusión,pero este le fue arrebatado de las manos por su hermano mayor.
-Mamá dijo que no kouki.
Kouki al ser un pequeño doncel demasiado sensible comienzo a llorar y kagetora sintió pena por su pequeño sobrino, vio a su hija y esta lo miraba preocupada así que se acercó al pequeño, lo sorprendió con un regalo especial: un cascanueces pelirojo y de ojos impares que había sacado de su bolsillo. Su hermano mayor recibió un rey de los ratones: un muñeco de ojos verdes cual demonio, cabellos dorados y lo que representaba a este personaje, era el tatuaje que bajaba por su brazo. kouki estaba muy feliz, pero su hermano kora no y le arrebato el cascanueces a kouki. en una pelea entre ambos hermanos, se rompe el brazo del cascanueces, pero kagetora lo arregla con una venda y lo deja casi como nuevo.
-bien niños, ya basta de todo esto-dijo el madre de ambos bastante molesto por la actitud de ambos sobre todo la de kora- vamos a cenar y celebrar con la familia ¿de acuerdo?
al recibir la afirmación de ambos hermanos, la fiesta continua entre recuerdos y risas, todo el ambiente feliz y en paz hace a ambos hermanos olvidar su enojo y divertirse, pero algo estaba muy claro, kouki no quería soltar al cascanueces, hasta que se quedo dormido en el sofá, su padre lo llevo hasta su habitación y su cascanueces se quedo junto al árbol. la fiesta duro un poco mas hasta que todos se fueron a dormir y la casa se quedo en silencio.
al ser casi las doce de la noche. el castaño abrió los ojos y busco a su cascanueces, al no encontrarlo, recordó que estaba junto a el en el sofá de la sala. el silencio que había en la sala fue interrumpido por los pequeños pasos del castaño, quien buscaba desesperado a su querido cascanueces, al cual encontró bajo el árbol, un poco aliviado se recostó en el sofá y coloco al cascanueces contra su pecho y cerro los ojos cayendo en los brazos de morfeo.
las manecillas del reloj dieron las doce y una melodía comenzó a sonar en toda la habitación, de entre la oscuridad un rayo amarillo surgió, el cual fue pasando sobre todos los juguetes y adornos de la habitación. kouki se removió un poco y dejo caer su abrazo derecho al suelo, pero
el cascanueces ya no estaba con el.
el rayo amarillo paso al rededor del cascanueces y este cobro vida, se dispuso a avanzar, pero antes le hecho un vistazo al peque doncel que estaba dormido.
- vaya - el de ojos disparejos analizo el rostro del castaño y luego su pequeño cuerpo antes de volver a su rostro- es un muy lindo chico - el pelirrojo giro repentinamente cuando escucho murmullos cerca de donde se encontraban- ratones... - giro a ver al castaño una ultima vez y se encamino sacando su espada hacia esos ruidos.
kouki fue despertando por el ruido, extrañado, el pequeño doncel busco a su cascanueces y no lo encontró, su mirada recorrió la habitación, ahogo un grito cuando vio al cascanueces siendo acorralado por ratones. el cascanueces trataba de atraer su atención pues debía derrotarlos, pero sobre todo alejarlos del lindo doncel que esta dormido en ese sofá, pero este estaba decidido a ayudarlo así que el castaño se encamino a hacia ellos con un jarrón en mano, pero este fue interceptado por el rey de los ratones.
-¿a donde vas pequeño mono? ¿quieres ayudar a tu cascanueces? bien, lo ayudaras - del cetro que tenia, apunto directamente hacia el castaño y una aura lo envolvió haciéndolo pequeño- ya no eres tan grande ¿no mono? - se acerco a grandes zancadas y tomo al pequeño del cuello de su piyama, asustando al pequeño castaño quien tenia los ojos llenos de lagrimas- oh, el monito va a llorar.
-¡ aléjate de el nash! - nash fue empujado con violencia. el cascanueces sostuvo a kouki de la cintura para evitar que se cayera, el pelirrojo y el castaño se miraron fijamente, era rojo/amarillo contra el café - ¿estas bien?
-s-si.. muchas gracias - kouki sintió como era tirado hacia atrás. el cascanueces lo había puesto detrás de el con espada en mano veía fijamente a aquel rubio y a sus sirvientes que lo acompañaban.
-¿puedes llegar a la repisa?
- no lo se- el cascanueces vio de reojo al castaño antes de volver a fijar su atención en sus enemigos.
-inténtalo por favor - el castaño no espero mas y corrió a tratar de subir y mientras subía veía al cascanueces, estaba perdiendo, eran muchos enemigos. cuando el rey trato de matar al pelirrojo, kouki le aventó su zapato haciendo perder el equilibro al rubio, quien finalmente cayo al suelo y fue retirado por sus sirvientes. Ambos subieron a salvo hasta la repisa donde un castaño se aventó sobre la cerámica fría aliviado, sin notar a un cascanueces que lo miraba intensamente.
-¿Como te llamas? -El castaño se estremeció por lo autoritaria de la voz, su cabeza giro lentamente hasta que sus orbes castaños chocaron con los rojos de su contrario.
-F...Furihata... Kouki - se levantó un poco de donde estaba y se sento con las rodillas cruzas viendo al cascanueces con un lindo sonrojo en las mejillas.
El pelirrojo avanzó hacia el tímido castaño con una leve sonrisa, sin duda este castaño tenia algo especial.
El castaño se avergonzo cuando vio al pelirrojo hacer una reverencia frente a él, pero sus mejillas se tornaron tan rojas como un tomate maduro cuando el pelirrojo tomo su mano y la beso.
Tomo su mano y la beso.
Su mano.
-Un placer kouki -el castaño comenzó a balbucear, sacándole una sonrisa al pelirrojo- mi nombre es akashi.... Akashi seijuro.
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El Cristal De La Media Noche
Random-¡espera no te vayas! -Un pelirrojo corría tras un hermoso doncel castaño quien bajaba rápidamente por las escaleras de su Castillo hacía la entrada donde un carruaje lo esperaba.-¡Por favor! ¡dime tu nombre!- noto a sus guardias saliendo de los pas...