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Yoongi estaba que se moría del cansancio, ya no quería seguir yendo a clases pero tenía que o si no todos sus lujos serían arrebatados. Entró a su hogar y dejó tirada su mochila en el suelo, miró a la mujer que le había entregado el dinero limpiando una mesa de vidrio, se acercó a ella y tocando su hombro llamó su atención.

–¿Se fue el chico?–Preguntó mirando el rostro de la mujer altamente nerviosa.

–No, no salió de la casa y en lugar fue a su habitación, joven.–Respondió.

Yoongi pasó una mano por su rostro en frustración, ese jodido niñato tenía que irse, amaba su soledad y no quería a ese malcriado rondando por su casa. Subió las escaleras y con mala cara se dirigió a su habitación y cuando la abrió vio al demonio acostado en SU cama, su preciada y amada cama.

–Mueve tu culo sucio de mi cama.–Ordenó entrando a la habitación.

–No.–Contestó a secas.

–Largo, no te quiero aquí. Ya obtuviste lo que querías y hasta te pagué.–Dijo acercándose a el demonio.

–Y es por la misma razón que sigo aquí, me trataste como una puta.–Se quejó el otro mirando al de hebras azabaches.

–Es lo que eres, ¿no?–Preguntó sarcástico.

–Claro que no, jamás sería algo así.–Aseguró.

–Eres un adicto al sexo, justo como una, solo buscando una cama y quien se la meta.–Dijo Yoongi sonriendo con orgullo, le parecía divertido los ojos que desprendían muerte de aquel chico.

Jimin se levantó en silencio de la cama y con furia dejo aparecer sus cuernos que ahora eran más grandes al igual que su cola, sus pequeñas manos ahora tenían los dedos de un negro intenso y con uñas realmente largas, sus ojos brillaban intensamente y con una mueca dejó ver sus pequeños colmillos. Con fuerza sobre humana tomo del cuello a Yoongi quien no mostró signos de temor.

–Será mejor que te disculpes.–Habló Jimin apretando sus dientes fuerte.–No tienes ni idea de lo que estás diciendo, yo no soy una puta.–Sus se veían algo cristalinos.

–Ja-jamás.–Jadeó Yoongi, el aire no pasa correctamente a sus pulmones.

–¿Acaso no le temes a la muerte?–Preguntó con una sonrisa maliciosa.

–Ni u-un poco.–Sonrió.–¿ I-ire al ci-cielo o al infierno?–Preguntó mirando directo a los ojos del otro.

Jimin lo miró unos segundos para después pegar sus labios a los contrarios, era un beso furioso y ardiente. Ese estúpido humano le hacía de frente sin temor, le encantaba, le encendía, justo lo que buscaba. Rompió el beso y soltó a Yoongi quien tosió con fuerza mientras recuperaba el aire.

–Siento decirte que no soy fan de la asfixiofilia.–Dijo Yoongi en burla.

–Lastima, yo la encuentro excitante.–Se encoge de hombros Jimin.

–¿Por qué no me mataste?–Preguntó Yoongi.

Jimin le miró y solo le sonrió, volvió a ocultar sus cuernos y cola, sus manos volvieron a la normalidad y sus ojos ya no brillaban.

–Eres alguien interesante Min, no puedo dejarte ir tan fácilmente.–Contestó en simpleza.

–Lastima que yo no te quiero aquí.

–Lastima que me importa una mierda tu opinión, me quedaré.

Yoongi suspiró molesto.– Vamos, busca a alguien más que realmente estoy ocupado.

–Oh vamos, tienes que verle el lado bueno, dejaras de estar solo y tendrás a alguien que te ayude en tus tareas.

–Como si tu supieras algo.–Rodó sus ojos.

–Yo también fui un estudiante cuando estaba vivo, sé algunas cosas.–Reprochó.

Min alzó una ceja curioso ante la respuesta del chico.–¿Cuándo estabas vivo?

Jimin le miró serio y aparto la mirada.–No es de tu importancia.–Respondió en un tono frío.

–Cierto, no la es.

Los dos se quedaron en silencio, realmente Yoongi no sabía que hacer, ese mocoso estaba más que claro que no se iría y no podía hacer mucho, no era como que se fuera a poner a lanzar agua bendita por todos lados y a recitar la Biblia todos los días.

–¿De verdad te vas a quedar?

–Eso mismo, no acepto rechazo alguno.–Aseguró Jimin.

–En ese caso, tendrás que pagar tu estadía aquí y será ayudando en la casa.–Sentenció Yoongi.

–¿Disculpa?–Jimin lo miró incrédulo.

–Disculpado, tendrás que limpiar e ir de compras cuando algo haga falta.

–Oh vamos, podría mejor darme polvos contigo en vez de limpiar.

Yoongi rodó sus ojos.–Cuando yo quiera podremos tener sexo, pero solo cuando yo quiera.

Jimin sonrió con emoción.–Entonces mañana nos espera un largo día.

Yoongi asintió y se acostó en su cama y Jimin fue tras de él pero rápidamente fue pateado fuera de esta, en el piso miró a Yoongi quien descansaba perezosamente.

–Hey, eso fue grosero.–Se quejó Jimin.

–Nadie toca MI cama, es solo mía y yo soy el único que puede dormir en ella.

–Eres un ridículo.

–Sí sí, ahora apaga la luz.

Jimin le miró molesto.–¿Dónde dormiré?

–En el suelo, si te da frío...te aguantas.

Jimin gruñó por lo bajo y con un chasquido apagó las luces, en el suelo ahora habían mantas alcolchonadas y algunas almohadas, podía aparecer una cama pero prefirió obedecer a el gruñón ese para ganar un poco su confianza. Volvió a chasquear sus dedos y ahora tenía algo cómodo para dormir, se acostó y tapó con una cobija.

Yoongi miró al chico desde su cómoda cama e hizo una mueca en sus labios, había olvidado tomar alguna manta así que sin más que hacer cayó rendido.

☪ ☪ ☪

Tendrá un comienzo un poco lento para que el yoonmin se desarrolle como es debido. Yoongi como ven le importa muy poco la existencia de Jimin así que por eso el desarrollo lento.

PD: Amo el comportamiento de este Jimin.

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⏰ Última actualización: Jun 01, 2019 ⏰

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