Cicatriz de un triste Otoño

~Nueva~

Hemos estado siguiendo a esta señora por horas, creo y aun no llegamos a la casa de la que tanto nos ha hablado. Le he echo una seña a Marie para conversar

-¿crees que realmente existirá esa casa?-dije mientras continuaba siguiendo a la señora

-no tenemos porque desconfiar de ella-sonrío

-siempre tan sonriente-miré el mar

-a la vida hay que sonreírle-comenzo hacer una sonrisa mas grande

-yo..olvide como sonreír-baje mi mirada

-ya llegamos!-dijo pegando un leve un grito la señora

Nos aproximamos mientras ella sacaba sus llaves. Al abrir la puerta, nos dió el permiso de entrar inmediatamente. Era bastante hermosa, sus paredes estaban entre un rosa palido u pastel, continuan unos hermosos cuadros decorativos 

-vengan, os servire algo-la hemos seguido hasta llegar una mesa

La cual contenia 6 sillas y con un hermoso florero en su centro. ¿Porque 6 sillas si vive sola?. Ella se fue por unos momentos 

-Marie ¿realmente esta es una buena idea?-la mire fijamente

-digamelo usted, señorita-tras decir eso, simplemente se sento en una de las sillas sin importar nada

-ya he traido todo-llego la señora con una bandeja con tazas de te

-le ayudo-dije acercandome a ella pero se detuvo

-no, esta bien-sonrió e me hizo una seña de que me sentará en la silla al lado de Marie

Eso hice mientras la observaba servir el te , esto se me hace muy raro. ¿Quien invitaria a una completa desconocida a su casa?

-ya estamos todas-se sentó en la silla de al frente de nosotras- espero que os guste

He mirado el te y no parece nada raro...mire a Marie quien tambien me estaba observando sin darme cuenta pero cuando nuestras miradas se chocaron, ella solo sonrió

-Marie, podrias ser la primera en beber este te fabuloso echo por esta bella dama?-dije sonriente

-por supuesto-agarró ligeramente su taza y le dio una dulce probado- esta perfecto, hace un te muy rico. Felicitaciones, señora

-gracias-sonrio

Segui mirando mi taza, incapaz de beberla. Tengo una sensación muy rara..

-¿que pasa, hermana? ¿no sabes beber una taza de aquí? te enseñaré-comenzó acercarse tomando mi taza, ponerla ligeramente en mis labios para darle un sorbo

-podrías parar de hacer este-finalmente al tragar, me percate de su amargura..

-¿que pasa, hermana?-dijo observando la taza y bebiendo un poco de esta..

-nada-he observado a la señora

-bueno, de seguro que estais cansadas. Os enseñare vuestras habitaciones-dijo parándose de la mesa e yéndose hacia unos pasillos 

La hemos seguido y siendo que estamos dando vueltas con mas vueltas... ¿nos hace un recorrido de la casa?. Finalmente llegue a <mi> habitación, la cual era bastante rosa... ¿no que dijo que tenía un hijo? Comencé a tambalearme lentamente

-¿que pasa, hermana?-dijo Marie tomándome de los hombros

Siento que me desmayaré... recuerdo antes de observar el negro luminoso , haber visto a Marie antes...

*Tiempo después*

Comencé abrir lentamente mis ojos, observando el techo colorido...me senté en la cama y observe detalladamente el lugar hasta dar con una ventana ¿ya es de noche? ¿donde esta Marie?

-con permiso, mi señorita-entró a la habitación

-¿que paso?-pregunté y ya sabía a que me refería

-no sabría decirle con certeza, ya que yo tambien he bebido de aquella taza y estoy perfectamente-sonrió- quizás haya sido el cambio e esfuerzo que realizo de ambiente 

-¿estas segura?-dije y ella comenzó acercarse

-por supuesto-dijo tomándome el mentón

-¿puedes dejar tus actos homosexuales para después?-dije fría

-tiene razón, no es momento-se alejó- tiene que darse una ducha e comenzar a prepararse mentalmente para mañana

-¿mañana? ¿que habrá mañana?-dije

-el instituto-dijo mirandome fijamente

-¿que instituto? es el Sweet Amoris?-la mire

-que inteligente es. Ya preparé todo, compré útiles y todo lo necesario. Me explicaron un tanto sobre que tenemos que ver a un joven llamada Nathaniel, no se vaya a enamorar-dijo sonriente

-no digas porquerías, jamás me enamoraría y menos de personas humanas-dije sonriente

-esa es mi muñequita-me hizo una suave caricia por la mejilla 

-bien, tomaré un baño

Me levanté de la cama , agarre una pijama que escogio Marie junto con una toalla e me guio al baño. Entramos juntas como de costumbre, ella me ayuda en todo y conoce cada parte de mi cuerpo

-sus pechos han estado creciendo ¿será la famosa adolescencia?-al decir aquello no pude evitar ruborizarme 

-callate! y has tu trabajo-ante aquella respuesta de mi parte, solo volvio a sonreir y continuo lavando mi cuerpo

Entre el agua caliente y los masajes suaves de Marie, no pude aguantar mas y caí dormida en pleno baño

*Post Marie*

Se quedo dormida mi muñeca. Mañana será un día dificil pero tal como nuestro contrato menciona, estaremos siempre juntas hasta el día de tu venganza e pueda llevarme tu preciada alma. Ya quiero devorarla...La tome delicadamente entre mis brazos, le puse su pijama y la recosté sobre su nueva cama. Buenas noches, mi señorita