Fahir

XXVI: Sorpresa

Le dio un suave beso, seguido por muchos más cortos, sonriendo ambos. Había sido tan estúpido alejarse de él, cuando era el único que podía hacerla sentir tan bien.

La abrazó, sintiéndose seguro en sus brazos, pudiendo escuchar su corazón, su respiración, que tan en paz lo hacían sentir.

—¿Te irás igual luego de esto?

—No lo sé, tú me haces tan difícil las cosas. Encima me miras con esos ojitos bellos, y no puedo resistirme —sonrió besándolo una vez más.

—Sólo quédate a mi lado —le dijo suspirando—. Sé que lo nuestro puede funcionar, pero necesito que te quedes aquí.

—No es tan fácil.

—Sí lo es ¿Por qué lo complicas? Simplemente... Debes decir que sí.

—Es que —suspiró, cerrando los ojos—... No hablemos de eso ahora ¿Sí? Ahora estamos juntos, y eso es lo que importa.

-o-o-o-o-

—¿Por qué estás enojado? —preguntó curiosa, mirando a su amigo.

—Mi padre trajo a una mujer a mi casa. Él dice que ella es su Umi'et.

—Oh ¿Y eso es malo?

—Mi mamá era su Umi'et. No a cualquier mujer le dices eso.

—Tal vez él sólo estaba confundido.

—De su "confusión" nacimos nosotros.

—Pues, mi mamá es Narel, que no es mi mamá biológica, y es la Umi'et de mi papá, que tampoco es mi papá biológico. Y yo a ella la amo, es una mujer muy buena.

—Es diferente, Luna.

—¿Por qué?

—Sólo olvídalo. ¿Te parece si nos vemos luego? Quiero leerlo solo.

Lo miró afligida, y rápidamente cambió su expresión a una de enojo. Narel le había enseñado que nadie tenía el derecho de ocupar su tiempo, y luego echarle como si no valiera nada. Y Sashie había sido quién le había pedido de ir juntos a la biblioteca.

—¿Qué te pasa? —le preguntó confundido, al ver que la niña había afilado las pupilas, y estaba con sus orejitas de gato hacia atrás.

—Mi tiempo, es importante para mí. No voy a venir más cuando me llames —le dijo molesta, tomando su libro.

—Pero es que-

—Le diré a mi papá que me venga a buscar —sentenció tomando su celular, saliendo de la biblioteca.

Sashie observó arrepentido como se iba, y suspiró, sentándose sólo. No quería ofenderla, pero tampoco se encontraba del mejor ánimo para estar acompañado.

-o-o-o-o-

Se tomó aquella píldora que le habían dado en la enfermería del asentamiento, y se miró preocupada en el espejo. No tenía planeado tener relaciones con Fahir, ni siquiera había imaginado que él la perdonaría tan fácil, por lo que ninguno de los dos se había cuidado.

No quería un bebé, no estaba segura que pudiera quedar embarazada, pero ante la duda, había pedido la píldora de emergencia. Ellos aún no tenían una relación estable, y vivían muy lejos.

—Nai ¿Estás bien? —preguntó Fahir del otro lado de la puerta del baño—. ¿Qué tienes?

Respiró profundo, y salió del baño, observando esa mirada preocupada.

—¿Te lastimé? Creí que había sido cuidadoso.

—No, claro que no —sonrió cálidamente—. Es sólo que no nos cuidamos, y es por eso que fui a la enfermería. Necesitaba una píldora.

—¿Para qué?

—Es una píldora de emergencia que se toma cuando has tenido sexo, y no te cuidaste. Es para evitar un embarazo.

—¿Qué? ¿Y cuál es su función? ¿Eso mata al bebé?

—No mata nada, porque no hay bebé. Esa es su función, impedir que se cree un bebé.

—¿Segura?

Asintió con la cabeza, abrazándose a él.

—Sí, no te preocupes.

—Nai ¿Ya decidiste qué harás?

—Debo volver, pero nada va a cambiar entre nosotros, Fahir. Te lo prometo, volveré para mis vacaciones, y en estos meses que aún nos faltan, buscaré un trabajo por aquí. Si lo consigo antes, entonces nos veremos más pronto.

—Está bien, pero si yo hablo con Onías, y el consigue un trabajo para ti ahora ¿Te quedarás?

—Tendría que viajar igual, pero volvería en unos días.

La miró a los ojos, y la besó, tomándola del rostro.

—De todos modos hablaré con él —susurró contra sus labios—. No me importa que sólo pasen unos días más sin verte, si luego podrás vivir conmigo.

-o-o-o-o-

-Semanas después-

No le había dicho nada a Fahir que llegaría aquel día al asentamiento, quería darle la sorpresa. Incluso le había pedido a Onías que guardara el secreto. Pero como desde hacía varios días presentaba malestares, y algunos síntomas extraños para ella, su primera parada en el asentamiento, había sido en la enfermería.

Gracias a la hija del gobernador, contaban con los mejores equipos tecnológicos del estado, y médicos también. No sabía si era imposible o no, pero tenía la certeza de que no podía ocurrir aquello.

Sólo había pasado dos, desde que habían tenido relaciones, y que ella había tomado la píldora.

—Señorita Queen.

Se levantó del banco, y fue hasta el consultorio dónde minutos antes la había atendido una ginecóloga.

—¿Entonces? ¿E-Estoy... Embarazada? Sólo pasó una hora y media, casi dos, hasta que tomé la píldora.

—En algunos casos, los espermatozoides pueden tardar hasta diez horas para llegar al óvulo. Otros incluso pueden tardar días, hasta tres, en el útero de la mujer, antes de fecundar un óvulo, o morir. Pero, también hay casos que sólo tardan media hora en llegar al óvulo.

—¿E-Entonces?

—Según la fecha que me diste, aún es muy temprano para saber si estás o no embarazada. Sólo han pasado tres semanas. Te haré una cita para dentro de dos semanas, y repetiremos el test si quieres.

Respiró profundo, y asintió con la cabeza.

—De acuerdo, volveré entonces en dos semanas, y hasta ahora, no estoy embarazada.

—Así es, incluso si tienes un retraso en la menstruación, o si sientes los senos hinchados, o dolores de cabeza, pueden deberse a la píldora de emergencia también. Por el momento, te haré una lista de médicamentos que debes evitar, en caso de que sí lo estés.

—Sí, mejor prevenir —murmuró, intentando ocultar su nerviosismo, mientras la doctora le anotaba una lista de médicamentos prohibidos.

Si llegaba a estar embarazada, Fahir no iba a querer que ella viviera en otra casa que no fuera la suya. Y sus hijos... Sashie estaría más molesto aún con ella.

El niño todavía no lograba aceptar a la pareja de su padre.

...

¿Recuerdan cuando dije que el domingo pasado sería el último? Qué ilusa fui :'v jajajaja 😂🤣❤️