| Élღ | Justin Bieber & Tú | INCOMPLETA

CAPÍTULO 4

Me fui de ahí resignada, simplemente me parecía insoportable ahora.

Salí de la preparatoria furiosa y me encontré con mi hermano Matt afuera recargado en su auto. No dije ninguna palabra, solo subí al auto y azoté la puerta.

- ¿Qué te pasa pequeña? ¿No había rollo en el baño o te atoraste en el inodoro?- se rió de mi.

- No estoy de humor para tus juegos, Matt.- contesté irritada.

- Vaya, lo que sea que fuera estás muy enfadada. Jamás me llamas por mi nombre, siempre me dices algún apodo.- explicó.

- Matt, solo conduce porfavor. - le dije.- Quiero irme a casa.

- Está bien, pero quita esa cara larga. - pellizcó mi mejilla.- A ver ¿quién es la mejor hermanita del mundo? ¿Quién lo es?

Solo reí. Matt solía hablarme como bebé cuando me enfadaba y eso usualmente me ponía de buen humor.

- Tal vez yo.- le contesté sonriendo.

- Eso es pequeña, me gusta verte sonreír.- me devolvió la sonrisa.

- Anda bobo, tengo que hacer los deberes.-hablé.

- ¡Que aburrido! Mejor hay que ir al parque a tomar un helado ¿qué te parece?.- sugirió.

- No lo sé.- dije insegura.

- Vamos no seas aguafiestas. Te pagaré el helado que tú quieras.- insistió.

- De acuerdo, solo iré por el helado.- bromeé.

- Que interesada eres.- reprochó.

Después de esa charla nos dirigimos hacía el parque, que no estaba demasiado lejos, quedaba cerca de mi casa. Llegamos, bajamos del auto y me permití a mi misma disfrutar del paisaje que me brindaba el pequeño parque.

Hace tanto que no venía aquí. Veía la brisa que acariciaba suavemente las hojas frescas y verdes de los árboles y a los niños riendo alegremente mientras jugaban, este si que era un lindo día.

- Bien, ¿qué tienes planeado?.- pregunté.

- Sinceramente no tengo idea.- dijo riendo.- Solo que no venimos aquí desde que éramos pequeños. Ya casi no pasamos tiempo juntos así que, me pareció bien venir aquí.

- Matt ¿de que hablas? Te veo todos los días por la mañana, tarde y noche.- le dije.

- Pequeña, no es lo mismo de antes.- dijo nostálgico.- Ya no salimos a ningún lugar juntos, solo te llevo y traigo de la escuela. Esas son las veces que te veo. De verdad te extraño.

- Ay Matt.- lo abracé.- Sabes que eres lo más importante en mi vida. De verdad te quiero tanto.

- Y yo a ti pequeña.- suspiró.

- Bueno y ¿qué hacemos aquí? ¡Hay que ir por esos deliciosos helados!.- exclamé.

Caminamos platicando animadamente hacía el puesto de helados. Llegamos y pedimos nuestros helados.
Después de tenerlos nos fuimos de vuelta al parque donde nos sentamos en una banca y comenzamos a conversar de nuevo.

- Oye, ¿te puedo hacer una pregunta?.- cuestioné.

- Pequeña, ya lo estás haciendo.-bromeó.

- Qué gracioso.- dije sarcástica.

- Okay, perdón. ¿Cuál es tu pregunta?.- me dijo.

- ¿Por qué no dejas que me acerque a Justin si tú eres su amigo?.- pregunté.

- Precisamente por que es mi amigo sé como es. No es bueno para ti pequeña. Trata a todas las mujeres como juguetes, es muy impulsivo, y no me gustaría que te hiciera daño.-me dijo.

- Entiendo que te preocupes por mi. Pero creo que yo ya soy lo suficientemente madura como para saber seleccionar mis amistades ¿no crees?.- contesté.

- ¿Madura? Si ______, lo dice la niña que hizo berrinche aquella vez que no la dejaron ir a una fiesta por que no limpiaba su habitación.- se burló.

- Oh, mejor cállate tonto.- le dije avergonzada.- Y.. ¿Tienes alguna idea de porqué es como es?

- No lo creo. Lo conozco desde que éramos niños y déjame decirte que cambió. Ya no hablamos como antes- cruzó sus piernas.

En ese momento volteé a mi derecha y lo vi a él girando hacia acá platicando con alguien.

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