Piensa mal y acertarás. (¯'·.' Estreno Capítulo 2!!!!!!~.·'¯)( Editado~)

(¯'·._.·[Capítulo 2]·._.·'¯)

Después de una agotadora mañana, Astrid llegó a casa, como de costumbre estaba sola ya que su madre trabajaba, dejó la maleta y subió corriendo las escaleras hasta casa de su abuela, tocó el timbre, espero unos segundos y volvió a llamar pero nadie le abría la puerta.

"Lo que me faltaba, mis abuelos se han ido y ahora me tendré que poner a cocinar”, pensó Astrid. Después de una agotadora mañana, Astrid llegó a casa, como de costumbre estaba sola ya que su madre trabajaba, dejó la maleta y subió corriendo las escaleras hasta casa de su abuela, tocó el timbre, espero unos segundos y volvió a llamar pero nadie le abría la puerta.

"Lo que me faltaba, mis abuelos se han ido y ahora me tendré que poner a cocinar”, pensó Astrid.

Astrid no tuvo más remedio que hacerse la comida y sentarse a ver las noticias en el salón; su casa era un piso situado en la periferia de la ciudad de San Fernando, tenía una amplia cocina en tonos marrones y blancos, un salón blanco con muebles de color caoba oscuro, una habitación ropero, un cuarto de baño con ducha, el cuarto de su madre era en tonos morados con toques plateados y con cuadros de Buda y su cuarto era una mezcla de rosa fucsia, blanco y negro con estanterías llenas de libros y pósteres de anime y cantantes K-pop, una televisión con la Xbox 360 enchufada y un ordenador.

Mientras estaba viendo la televisión dieron la noticia de que en la ciudad vecina ya había dado el mismo caso de personas incineradas y que ya habían hallado siete cadáveres, todos en casas antiguas del casco histórico de Cádiz pero según los informes de las autopsias eran personas de entre 18 y 30 años supuestamente y lo estaban investigando profundamente por si era un asesino en serie y demás parafernalias, Astrid se asustó por pensar que era tan cerca, pero en verdad no le dio demasiada importancia ya que nunca pensaría que le podría ocurrir a ella misma.

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Después de tanta sangre de venganza se sentía bien, por fin pudo matar a aquellos desgraciados que tanto les había costado atrapar, lo mejor de todos es que iban juntos y no se habían separado, desde que hicieron lazos de sangre lo que hacía que no se pudieran separar a más de un kilómetro y todo gracias a su querida e inteligente madre.

Pero, ¿Qué lo ataba allí ahora?, o mejor dicho que lo ataba ahora a la vida, sin un propósito que seguir y sin una venganza clavada en el corazón.

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Eran las ocho de la tarde y Astrid ya no sabía qué hacer , era martes así que sus amigos no salían , ella ya estaba aburrida de mirar el Tuenti una y otra vez sin nada ni nadie que la distraerá y decidió ponerse a leer, o mejor dicho a releer uno de sus libros favoritos.

Medianoche* trataba sobre una chavala media vampiresa que vivía en un internado al que tuvo que mudarse con sus padres y esperaba el poder convertirse en vampiresa algún día y lo aceptaba, pero claro en toda historia de adolescentes hay un amor y esta Bianca por el chaval del que se enamoró decidió fugarse con el para que no la transformaran y pudiera estar con él, ya que él era un cazavampiros.

Astrid pensaba, de esta historia, que porqué había que sacrificar cosas, cuando se supone que el otro/otra te acepta tal como eres, eso le molestaba mucho y creía que ella eso nunca lo llegaría a hacer por nadie.

*Medianoche- Primer libro de la Saga Medianoche Claudia Gray.

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Era Septiembre, lo sabía por la combinación de lo caluroso que era el día y las refrescadas noches que hacía, después de tantos días espiando y escondiéndose no le prestó mucha atención a las horas ni a su imagen, se dio cuenta ya que la gente cuando pasaba cerca suya se apartaba con cautela y lo miraban con asco, así que se miró frente a un escaparate y vio en el la imagen de un mendigo, esas pintas no le pegaban a él siendo tan atractivo.

Fue al banco y coincidió que una atractiva bancaria que salía a echarse un cigarro, él pensó que se distraería con ella un rato y le dijo influenciándola con sus poderes de coerción.

"Dime todo lo que te pregunte a partir de ahora, ¿Quién es el director de este banco?, dijo hablando en un perfecto español.

"Estoo.. sí, el director se llama Francisco...", dijo la bancaria mientras que sucumbía su mente al estado semiinconsciente.

"¿Se encuentra dentro?"

"No acaba de marcharse..." dijo la bancaria embobada mirando los ojos de él.

"Por casualidad, no sabrás donde vive", dijo entornando más los ojos para que el poder siguiera permaneciendo.

"Si, suelo ir allí cuando su esposa está trabajando vive en San Fernando en Villa Maruja en un chalet." dijo la bancaria.

"Así que eres su putita personal, que divertido es todo por aquí, ya que estas, recoge tus cosas y me llevaras allí personalmente" dijo el con tono humorístico." Ya que te matare seguramente, o por lo menos te desangrare un poco, dime cómo te llamas"

"Me llamo Claudia y ¿Cómo te llamas tú?", dijo Claudia un poco mas consciente.

"No te importa cómo me llamo, y veo que estas despertando así que, vuelve a mirarme a los ojos", dijo él entornando los ojos más aún.

Claudia cayó otra vez en el estado semiinconsciente.

"Así muy bien, ahora ve adentro, coge las llaves de tu coche y llévame a casa de tu jefe, seguro que se alegra de verte", dijo maliciosamente

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A las 9 de la noche llegó su madre, soltó las cosas y se fue a cambiarse, volvió al salón y le dijo a Astrid.

"Hola cariño", le dio un beso en la frente,”¿ Que tal el instituto, la clase y todo eso?

"Puf mama, cada año es peor y encima mi clase es de las peores, y no tengo con quien charlar aparte de tener una gilipollas por tutora", dijo Astrid

"Si claro todos los años dices lo mismo de los profesores", le dijo su madre riéndose.

"Tú te ríes porque no sabes cómo es el instituto pero cuando sea la reunión de padres ya la conocerás y verás que tengo razón", dijo Astrid

"Bueno, yo estoy muy cansada me voy a dormir, en la nevera tienes pizza, así que si tienes hambre te la haces, buenas noches cariño", le dio un beso y se fue a dormir.

Astrid se fue a la cocina y se hizo la pizza, como llevaba todo el día entre televisor y ordenador decidió ponerse en la terraza sentada en una butaca observando el atardecer de la Bahía.

Cuando se iba a ir a dormir, sintió una gran punzada en la cabeza y empezó a sentirse mareada hasta que poco a poco dejó de ver y sólo vio negro.

Astrid despertó notando su cuerpo muy ligero, pero un momento, no estaba en su cuerpo, lo que veía a través de esos ojos era el cristal de un coche que iba por la carretera.

Astrid intentó mover la cabeza pero no le hacía caso, sólo podía ver porque quién quisiera que fuese cuando giró la cabeza, vio a una rubia con cara de putona y súper maquillada con la tez muy pálida debido a la cara de miedo que tenía reflejada...

Todo se volvió negro de nuevo y una voz de fondo surgió...

"¡Astrid!¡Que te pasa! Astrid por dios despierta" gritaba su madre muy preocupada.

Al principio sólo fueron siluetas borrosas pero poco a poco fueron tomando contorno y lo que vio fue la cara de su madre encima de ella empapándola de lágrimas muy preocupada. 

"¿Qué ha pasado?" dijo Astrid muy confusa levantándose del suelo. 

"No se dímelo tú, yo he ido a coger agua del frigorífico y te he visto tirada, me has dado un buen susto" dijo su madre. 

"No sé, estaba levantándome para acostarme y de pronto me empecé a marear y supongo que me desmayé, será del estrés de saber que otra vez tengo que empezar la rutina, me habrá dado un bajón de azúcar”, dijo Astrid aún confusa, no le contó lo del coche porque pensó que seguramente era una alucinación provocada  por el mareo y la falta de azúcar.

Termino de recoger los restos de la pizza, puso el despertador  y se acostó para dormirse.