entre flores y tatuajes [adaptación] bnior;

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Suelta un suspiro, estaba bastante cansado, apenas tuvo los ánimos suficientes de levantarse y abrir su local, se dio cuenta lo tarde que iba cuando vio la tienda del chico lindo abierta antes que la suya. 

Al terminar de abrir el local dio una rápida mirada a la otra acera, encontrándose con una sonrisa del chico hacia el.

El chico lindo acababa de sonreirle. 

En un acto de quinceañera entra rápidamente a su tienda, apenas si devolviendole el gesto al chico contrario. Pone una mano en su pecho, sintiendo como su corazón bombea mas rápido de lo normal, nunca le había sucedido eso, el chico lindo nunca le había regalado una sonrisa. 

-¿Nos vas a dejar entrar o atenderemos a nuestras citas aquí afuera?- Fue la grave voz de su hyung que lo saco de su trance, haciéndolo reaccionar y así girarse a mirar. 

Mark y Yugyeom lo esperaban afuera con un gran signo de interrogación, Jaebum se veía claramente sonrosado , era evidente que algo le había sucedido a los ojos de Mark. Pero decidieron pasarlo por alto, el mas grande de estatura se veía bastante feliz y eso era lo que contaba. 

El de mas edad ya ocupaba su puesto en el mesón, haciendo un recuento de todas las citas que le tocaban a los menores, ya que estos dos eran bastante desorganizados como para valerse por si mismos. Yugyeom jugaba con su maquina, vigilando que todo estuviera a la perfección para atender a las personas. Se supone que Jaebum debía estar haciendo lo mismo que el menor, pero al parecer era mejor quedarse pensando en el chico lindo de la otra acera. 

-¿A donde crees que vas?- Fue Mark como siempre que noto al menor moverse con intenciones de dejar el lugar -Tienes a personas que esperan ser atendidas por ti. 

-¡Voy a comprar un enorme pastel de chocolate, Hyung! No puedo esperar- Jaebum sonreía como si no hubiese un mañana, pero para el mayor aquellas palabras no tenían sentido aunque el contrario estuviese feliz. 

-Este chico tiene pedida la hora hace bastantes días, cuando me llamo podio ser atendido por alguien que pudiese hacer bien su primer tatuaje, y te recomendé a ti- El mayor frunce el ceño, no quería quedar mal con un chico dulce, cuando había hablado con el desconocido sonaba demasiado jovial. 

-Yugyeom puede hacerse cargo de el, supe que no tiene ninguna hora en la mañana, a parte si es primerizo así puede tomarse bien su tiempo- Se coloca su abrigo por el frió del día, sonriendole por ultima vez- ¿Como se llama? 

-Park Jinyoung- Suelta un suspiro sabiendo perfectamente que haría Jaebum- 

-¿Lo quieres tu Yugyeom?- 

-Claro- Respondió por primera vez el menor restándole importancia.

¿Ves? Fue fácil hyung. Park Jinyoung se atenderá con Yugyeom quien le dejara un lindo tatuaje. Ahora, me voy adiós. 

Antes que pudiesen decirle algo al pelinegro salio de su tienda. Le fue inevitable no mirar hacia la otra acera, el chico lindo parecía inspeccionar algunos detalles de las flores, detectando al hermano de este al final de la tienda, parecía apenas despierto pero ocupaba bien su puesto en el mostrador. 

Sacude su cabeza caminando hacia la cafetería, ni siquiera sabia por que compraría un pastel, tanto pensar en el chico lindo se había convencido que también le gustaba el chocolate. 

Estuvo afuera por una hora y media, había aprovechado de tomar su desayuno, permitiéndose todo el tiempo del mundo, sabia que Yugyeom podría encargarse de todo, para ser tan joven era realmente un experto, algo que ni el mismo podía negar. 

Cuando entro a la tienda sosteniendo una bolsa con lo comprado, pudo notar a Mark algo diferente. Una interrogante se plasmo en su rostro observando al momento que el mayor hablaría, pero fueron interrumpidos por la puerta de la habitación de Yugyeom. 

-¡He terminado!- Era la jovial voz de Yugyeom, quien con una sonrisa de lado se saca sus guantes.-Puedo decir que es el mejor tatuaje que he hecho, ni siquiera el que le hice a mi hermano se le puede comparar. 

-¿Que clase de confianza es esa? Ver para creer- Responde el antes que todos haciendo notar su presencia, deja el pastel en el mesón del mostrador donde se encontraba atrás su mayor. -Hyung, guárdalo por mientras, voy a preparar la maquina.

Nuevamente pudo ver como el contrario quería decirle algo, pero primero llego a sus oídos una queja que llamo su atención y venia del lugar de Yugyeom. Fue inevitable no girar a mirar al menor, quien estaba entrando a su cuarto. 

-¡Jinyoung Hyung el dije que tuviera cuidado con su espalda!- Fue lo unico que escucho cuando cerraba la puerta. 

-¿A quien le hizo el tatuaje?- Pregunta de inmediato aun pensante de la voz que había escuchado, había sido tan dulce que calo dentro suyo.

-Atendió al chico que tu rechazaste, déjame decirte que el chico trajo su propio boceto y a sido lo mejor que he visto últimamente, hubiese estado mas que bien que tu se lo hubieses hecho- No respondió el mayor ignorandole, agachando su vista revisando su agenda.

-Ya... no hay que exagerar hyung, solo es otro cliente mas. 

-¡TU IDIOTA! DESAPROVECHASTE LA OPORTUNIDAD DE TU VID-

-Me dijeron que debía pagar aquí- Y ahí estaba aquella dulce voz nuevamente.

Se dio cuenta de las palabras de Mark, había sido un idiota al rechazar la cita de la mañana, ya que al joven que le debió hacer el tatuaje no era mas ni nada menos que el chico bonito.