Pude soñar que estaba entre sus brazos, que ya no me era difícil respirar porque sabía que no me dañaría la calefacción de su cuerpo y que su respirar topando mi cuello erizaba mi piel al más máximo, mientras nuestros pies daban roces tímidos me di la vuelta y cubrí más de su cuerpo con las sabanas.
Quería apreciar toda la noche y que al despertar el me viera y me arrojará entre besos y suaves palabras, Pude soñar que nuestro amor era más vivo que el sol y más claro que el agua, Mas ardiente que el fuego además de lo fuerte del viento...
Pude soñar que yo no era solo un pasatiempo y que el no era pasajero en mi vida, mi mente y cuerpo.
Pero él estaba tan lejos siendo el mejor músico y yo aquí entre sábanas blancas haciéndome cada vez más pequeño sin tener a mi estrella en mi cielo.