Capítulo 3

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Capítulo 3

El casarse con la familia de la esposa era francamente lo opuesto a las expectativas tradicionales chinas. Normalmente, el novio es el que está esperando en casa a que llegue la novia. Sin embargo, hoy, la novia estaba esperando en el palacio para casarse, mientras que el pobre Lin Shan tenía que hacer todo el viaje.

Además, la ceremonia real no solo era larga, sino también extremadamente detallada. De hecho, comparado con los plebeyos, era cien veces más complicada. Para la Lin Shan del siglo XXI, seguir paso a paso el matrimonio era una tortura.

Aun así, esta misión no estaba exenta de cosecha de beneficios.

Dentro del palacio, ¿quién no quiere ganarse el favor del emperador? Dado que la querida hija del Emperador se iba a casar, ¿no era esta la mejor oportunidad para ellos? Un grupo de funcionarios reales rodearon a Lin Shan, constantemente felicitándola mientras le entregaban un montón de oro, plata y joyas deslumbrantemente brillantes.

Al ver todos estos tesoros frente a ella, Lin Shan de repente sintió que su espalda ya no estaba adolorida, sus piernas ya no estaban cansadas y se volvía más devota hacia la ceremonia.

Sonrió felizmente a Xiao Lu y le ordenó que se llevara los regalos mientras seguía bebiendo con los invitados.

Hablando de alcohol, Lin Shan no podía dejar de alabarse a sí misma. Ella sabía que sería difícil evitar beber en una boda. Sin embargo, basándose en su baja tolerancia, sabía que su tapadera se soplaría en dos tragos. Desafortunadamente, su tolerancia es muy baja. Por lo que ordenó a Xiao Lu que cambiara el vino por agua. Cuando la gente miró, todos pensaron que este Príncipe Consorte podía contener su licor y aplaudieron sin parar.

Hablando de beber, Lin Shan usó nuevamente su pensamiento moderno del siglo XXI. Ella sabía que era inevitable que tuviera que beber en la boda. Por lo tanto, secretamente alertó a Xiao Lu y le dijo que cambiara el vino en agua. Otros no pudieron notar la diferencia y siguieron alabando al Príncipe Consorte por su aguante al licor.

"Aunque el príncipe consorte parece frágil, su tolerancia es tan alta. Definitivamente está a la altura del título de hijo de ministro."

"No se debe juzgar a una persona por su apariencia. La princesa tiene suerte de casarse con un hombre así. ¡Qué maravillosa unión!"

. . .

Al escuchar estos elogios, Lin Shan se rió por dentro.

¡Este es el mejor ejemplo de los beneficios de la sabiduría! Sólo un tonto bebería vino de verdad.

Mientras ella se dejaba llevar, los problemas llegaron en forma de Emperador.

"Luo-er, hoy te has casado con Ming Yue y a partir de ahora que eres mi yerno, asegúrate de tratar bien a mi princesa de ahora en adelante, ¿entendido?"

Definitivamente es digno del título de emperador, solo diciendo ligeramente unas pocas palabras era suficiente para hacer que Lin Shan se sintiera culpable. Soy una chica, ¿cómo "trato" bien a la princesa? ¿Le doy masajes en la espalda y los hombros?

A pesar de que por dentro estaba echando humo, Lin Shan asintió obedientemente: "Tu hijo seguirá las órdenes de su Alteza."

El Emperador sonrió ampliamente y asintió mientras gritaba: "¡Sirvientes, ofrecedle vino!"

¿Vino? Al escuchar esto, Lin Shan casi llora.

¿Cómo es que nadie le dijo que habría una ofrenda de vino? No había manera de que ella pudiera rechazar el vino del Emperador. Además, Xiao Lu no podía cambiar este vino por agua. Después de beber un poco ya se estaba mareando. ¡Si bebiera más, estaría en problemas!

Su alteza, reconozco mis erroresWhere stories live. Discover now