Tan dócil tu alma

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El pensar de Herodes.

Él aún sentía un hueco en el pecho al ver a todos los seres humanos, por qué tan solo no podía pensar qué fue hechado por una completa tontería, él aún sentía tan desplazado como anterior mente no cambio nada, solo que él corazón de Herodes se tornó duró, sin dolor, despiadado.

El corazón de Herodes no tenía nada más que rencor, odio hacia la humanidad por ser aquella que lo separó de luz eterna que cubría sus alas.

Herodes era uno de los ángeles más nobles de Dios pero el odio y el rencor le ganaron.

Su cuerpo adormecido por el odio solo le permite ver y pintar como que los mortales tienen la culpa de el dolor que ahora llena su alma.

Su cuerpo con heridas y cicatrices están al borde del colapso, pero él es muy valiente al optar por aquél que le hace daño.

Él aún no sabe qué pasará o como remediará el dolor que siente pero si no es con amor será con odio...



Nota de la autora.
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Bueno éste es uno de los comienzos del Herodes, espero que en verdad les guste o les llamé la atención, tan bien quisiera que me dieran ideas o cosas como para fracmentarle a la historia que acabo de comenzar.

Espero todo salga bien los quierooo :3

Se va corriendo*



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