4.- Desesperación.

405 44 25
                                    


-Espero no haber tomado, una decisión errónea... pero con todos los problemas que hay aquí, creo que fue, una buena idea. –Pensó triste, viendo hacia la ventana-

Todos los pasajeros habían abordado el avión, a los pocos minutos despego, para el chico era algo nuevo viajar en esta clase, le inquietaba un poco por estar en las alturas, al principio le dio un pequeño mareo. Pero después de tomar un poco de aire, se relajó un poco, pero su compañero de puesto, volteo a verlo con algo de curiosidad.

-Disculpa joven, tu no pareces un chico que viva en Irlanda. ¿Vas de paseo? –Indago el sujeto-

-¿Eh? N-No de hecho, es la primera vez, que viajo para allá. –Revelo cabizbajo-

-Mmm, ya veo... disculpa por molestarte, es solo que me aburro mucho, en estos viajes. -Expreso sereno-

-Tranquilo, no me molesta. –Susurro-

-Buenas tardes, se les ofrece algo de comer, o una bebida. –Dijo una empleada amablemente-

-Claro señorita, me puede traer una copa de vino. Gracias! –Respondió alegre-

-De acuerdo, ¿y para el joven? –Indico-

-No se preocupe, estoy bien... -Contesto sereno-

-Bien! –Dijo retirándose del lugar-

-Suspiro- Las mujeres son todo un misterio. –Comento serio-

-¿A qué se refiere? –Indago atento-

-¿Eh? Pensé en voz alta. –Recalco soltando una carcajada- Veras, hace mucho tuve una relación con una mujer, era sin duda la chica de mis sueños. Me enamore de ella, desde el primer momento en que la vi. –Contaba sereno-

-Sigua contándome. –Expreso interesado-

-Bueno, pasamos mucho tiempo juntos, momentos inolvidables para mí, -Suspiro- Fueron los mejores años de mi vida. –Comento cabizbajo-

-Disculpe... ¿cómo que fueron? –Pregunto tímido-

-La razón es que, mucho tiempo después, la vi salir con otra persona, pasaron muchas cosas por mi cabeza, podría ser que ya no sentía algo hacia a mí, o nunca le guste, no aguantaba más, cada día, me dolía la cabeza, solo en pensar en ello, algunas noches sentía unos fuertes golpes en el pecho, necesitaba saber quién era, pero cuando llegaba a la casa, su rostro reflejaba tristeza, nunca me atreví a preguntar o indagar al respecto, pero lo más probable es, que yo era la razón de eso, hasta esa noche que estuve en su hogar. –Expresaba cabizbajo-

-¡No! –Exclamo algo fuerte- Por favor dígame, que paso después de eso! –Suplico-

El hombre, volteo a ver al chico de frente, con una sonrisa falsa.

-Me aleje de ella. –Susurro- A la mañana siguiente, me desperté con mucho dolor de cabeza, por lo que, me quede en mi apartamento, ahí tuve tiempo para reflexionar, me di cuenta que tal vez, no era alguien correcto para ella, desde que nos conocimos, pensé que era el indicado para estar a su lado. Pero que digo, te estoy aburriendo mucho chico. –Expreso apenado-

-Para nada. Dígame, ¿Por qué nunca le dijo algo al respecto, porque decidió irse? –Indago-

-Supongo que apresure las cosas... pero ya está hecho, no puedes retroceder el tiempo y cambiar tus errores. –Aclaro-

-¿Y aun la amas? –Pregunto serio-

-Hasta el último día de mi existencia, es un sentimiento que nunca se disolverá. –Revelo serio-

En busqueda de un sueño (Kiane)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora