— sácame de aquí por favor, Jungkook — yo permanecía abrazada a su cuerpo con mi cabeza en su pecho. Él cogió la sabana envolviéndome en ell y me cogió en brazos, rápidamente andando hasta casa
Una vez estando en casa...
— relájate, relájate — dijo ya tumbándole en el sofá, aún abrazándome — abrázame y no pienses en eso — trató de calmarme, pero.. ¿cómo podía no pensar en lo que acababa de pasar? Un tío me violó y encima tengo que verlo en el colegio
— m-me violó — pestañeaba muchas veces, tratando de calmarme
— ya.. te dije que no pienses en eso Lia.. — suspiró — yo me encargaré de cargarme a ese pedazo de gilipollas — me dio un beso en la frente
— quiero ducharme, me siento sucia — le dije, el asintió entendiendo
— te dejaré ducharte, pero me quedaré en tu habitación para cuando salgas, por si acaso — me volvió a coger en sus brazos
— bueno.. está bien — contesté
— ¿te incomoda? — preguntó subiendo las escaleras
— no, pero me resultará extraño.. ya sabes, justo nos hemos empezado a llevar ahora y... siento vergüenza, ¿vale? — le dije sonrojándome, el sonrió
— por el amor de dios, soy tu hermano no tu novio — rió por primera vez conmigo — me iré de la habitación según salgas de la ducha, y me quedaré fuera en la puerta —
— pareces mi guardaespaldas — le miré
— lo soy — respondió
2 horas después..
— gracias — le dije una vez que él estaba sentado en mi cama, señalándole que ya podía irse
— ¿todo bien? Tardaste mucho — me dijo levantándose
— me duele el cuerpo.. — le confesé — lo siento —
— no te disculpes, todo bien — sentí como se tensaba aunque no dijera nada — maldito mal nacido... — susurró, aunque logré escucharle
Unos 30 minutos después, me alisté y me vestí ciertamente sencilla.. la verdad que no tenía ganas de hacer nada:
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Abrí la puerta viendo a mi hermano aún ahí, el realmente se quedó esperando 30 minutos en mi puerta
— ¿estuviste aquí los 30 minutos que estuve preparándome? —
— claro.. y, ¿por qué te vestiste? — alzó una ceja — ¿no pensarás salir a la calle, no? —
— Ah.. no en verdad — le contesté sin mentirle — no tengo ganas de hacer nada, solo quiero tumbarme y olvidar mi vida —
— vamos abajo.. — dijo y comenzó a bajar las escaleras, yo le seguí — ¿quieres ver alguna peli? — me preguntó
— por mí esta bien, pero hay algo que no quiero — le dije
— ¿qué? —
— quedarme aquí.. no quiero vivir aquí, jungkook — le miré a los ojos
— lo sé.. lo sé pero no tenemos dónde ir Lia —
— Ariana me dijo que sí.. ella no sabe nada de lo que pasó.. — tragué sonoramente
— tienes que contárselo, se lo merece. Ella es una buena amiga — asintió — yo te ayudaré si es necesario, ¿vale? — asentí
Vimos una película, los dos acurrucados, ahora como verdaderos hermanos. Después recogimos todo y fuimos hasta casa de Ariana, intentando no llamar mucho la atención de los vecinos. Tocamos la puerta, alguien nos abrió y no con una cara muy feliz, desde luego que... Ariana no era
