segunda parte

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Hola querido lector, si no has leído la primera parte, o quizás ya la olvidaste te recomiendo que la leas ya que está es su continuación.

La paredes de la habitación eran tan blanca intensamente profundas tanto como el miedo que sentía. Queria salir de aquí ¡No estoy loco, creanmen! Gritaba una y otra vez pero no recibía respuesta alguna.
No sabía cómo salir de aquí, ala hora del almuerzo se abrieron las puertas para salir de la habitación , camine por los pasillos buscando una salida o alguna persona ala cual pudiera explicarle mejor lo que aconteció aquella noche, pero ala única persona que encontré fue una pequeña niña de talvez 6 años la cual jugaba con lana sentada en el piso.
Me acerqué a ella
—oye, sabes dónde queda la salida?—
Comenzó a gritar —alejate— no entendía yo que había echo no le había ni tocado
De inmediato llegó una enfermera y empezó a hablar con ella
Yo me fui ala habitación para no ocasionar problemas
La niña empezó a redactar que había visto una sombra muy oscura detrás de mí y con su mano tapaba mi boca

Esa fue quizá el momento más feliz de mi vida ya que gracias a ello se comprobó que no estaba loco.

Me dieron de alta

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6meses después

Sigo viviendo con mi madre y adivinen que entrare ala universidad nacional a estudiar periodismo, la carrera que tanto había aspirado

En mi primer día de clases conocí a una chica llamada Carolina –tenia cabellos rubios,ojos claros, tez blanca– ella  me empezó hablar de la universidad de su experiencia en esta. Todo sonaba muy bien .

Pero me entró una duda ¿Si alguien pudo ver aquel faltasma todos lo pueden ver?.... Quizá no le preste tanta atención a aquella pregunta y seguí con mi día

Empeze a platicar más con Carolina en el trascurso de la semana tuvimos más de un acercamiento y nos dimos un beso, se convirtió en mi novia
Se la presente a mi mamá y quedó encantada
—cariño también quiero que conoscas a mi abuela— caro vivía con su abuela ya que sus padres estaba fuera de la cuidad
—claro, puede ser mañana después de clase—

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Ala mañana siguiente desperté con un gran dolor de cabeza, eso me alertaba de que algo no andaba bien, pero tome unas pasta he igual aisiti a clases, tome lugar con Caro y al terminar la jornada fuimos a su casa

Su abuela nos esperaba con un gran plato de comida que había preparado ella, pero al verme cruzar la puerta la expresión de su rostro cambio
—pasa algo abuela— dijo Carolina preocupada
—al chico le persiguen malas energias—
Yo nunca le había contado a caro lo que había pasado, pero creo que había llegado el momento.
Fue así como le conté, su reacción fue muy diferente a lo que esperaba, me apoyo y dijo que íbamos encontrar una solución para apartar aquel espíritu de mi.
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Lo siento por actualizar tan tarde pero lo prometido es deuda. Mañana estaré actualizando la tercera parte
Linda noche

Sonrisa SiniestraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora