Bet On Your Tattoos [L.S] Omegaverse

Capítulo 1

Despertar tarde un sábado, era algo que Harry consideraba como recompensa de todos lo días al levantarse temprano e ir a la universidad, el alfa pensaba que se lo merecía.

Él abre sus ojos, y lo primero que puede visualizar es la luz del sol entrando fuertemente por la ventana de su habitación, Harry se endereza, suspirando mientras ve a su alrededor, pensando en lo que hará más tarde o si solo se quedará todo el día en su casa, haciendo seguramente nada. El alfa finalmente se pone de pie, yendo hacia el baño para poder lavar su boca.

Cuando el rizado termina de hacerlo, él camina de regreso a su habitación para buscar el pequeño botecito de crema para ponerla sobre su nuevo tatuaje, hace solo dos días Jake, un beta que se ganaba la vida haciendo tatuajes y perforaciones, acababa de finalizar el tatuaje en su abdomen, Harry debió admitir que fue de los tatuajes más dolorosos que se ha hecho, pero el resultado le había encantado, así que había valido la pena para el alfa. Tan solo unas horas después, Harry se encontraba abriendo la puerta a uno de sus amigos, haciendo una mueca al verlo con cervezas en mano y una sonrisa.

—Vamos... Esa no es la reacción que esperaba. —Niall ríe y entra, el alfa cerrando la puerta detrás de él.

—Quería una tarde tranquila.

—Será algo tranquilo, seremos tú y yo nada más. —el rubio se encoge de hombros. —Además... ¿Cómo te fue con el omega?

Niall abre la lata de cerveza mientras se sienta y mira fijamente a Harry, quién ni siquiera sabe qué responder...

—Ya no sé qué más hacer, ¿sabes? Ese omega es... tan malditamente difícil, y solo hace que me vuelva aún más loco. —Harry suspira, dejándose caer en el sofá.

—¿Qué fue lo que te dijo?

—Déjame hacerte una pregunta primero. —Niall asiente en respuesta. —A ti no te gustan los tatuajes, ¿verdad? —el rubio niega. —Y si encontraras a una omega con tatuajes, ¿le negarías una cita por eso?

—No si me gusta.

—Oh, genial.

—¿Qué, por qué?

—No le gusto entonces... —Harry bufa, buscando algo que le ayude a que ese omega lo deje cortejarlo.

—¿Eso fue lo que te dijo? —sin querer el rubio ríe. El alfa lo ve mal. —Me parece estúpido.

—Ya sé.

—¿Por qué no lo cortejas? Es lo que todo omega quiere. —Niall le aconseja.

—Porque ni siquiera acepta una cita de mi parte.

—Entonces hazle una propuesta qué sé yo. Algo que le haga aceptar. —Niall  rueda los ojos y opta por acabarse lo poco que le queda de cerveza en su lata, lo hace de un solo trago.

                                        °°°

Harry piensa que... Llegar hasta los extremos de tener que dar algo a cambio para que alguien le acepte algo, le parece humillante, el alfa piensa en lo bajo que probablemente está cayendo al siquiera pensarlo, pero es algo que considera casi como una buena idea.

El rizado nunca fue un alfa como los otros, orgulloso sí, y quizás solo un poco imponente, más no iba por la vida como los otros por ahí humillando a los demás, tenías sus cosas de alfas, por supuesto, pero era poco común que las utilizará o que estas llegarán a salir de forma natural, él pensaba que era porque no había llegado alguien o algo para hacerlo a actuar de esa forma, tenía su popularidad en la universidad, eso sí, no es que a él le importara pero era algo que las personas habían creado y ya, tenía amigos, muchos y tenía tantos omegas detrás de él, tantos pero no al que él quería.