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La semana paso bastante rápido, mañana ya comenzaban las clases y nuestro tercer compañero de cuarto aun no llegaba, nos habían informado que vendría justo mañana.

Por suerte, Nick y Elías me habían tratado bastante bien, normal. Nadie sospechaba nada, la verdad era difícil actuar todo el tiempo, mas en las mañanas cuando recién me levantaba y no entendía ni donde estaba.

Almorzaba con Ashton en el patio, al parecer a él no le habían caído tan bien sus compañeros de cuarto y prefería almorzar conmigo.

—Me han invitado a almorzar con ellos, dejaron de comportarse como idiotas. —Me informo Ashton mientras caminábamos hasta el comedor de nuestro edificio. — ¿Quieres venir conmigo o tienes más opciones?

—Nick y Elías también me invitaron a almorzar con ellos, así que iré a ver. ¿De qué hablan los hombres mientras almuerzan? —Pregunte. En mi cabeza imagine una conversación completamente sexista y demás.

—A ellos dos no los conozco, así que ni idea. ¿Te das cuenta que te vas a sentar en la mesa de los populares? Vas a ser uno de ellos, Emily. —Pronuncio mi nombre en un susurro. —Espero que eso no te traiga problemas.

—Lo sé, pero primero necesito que me acepten. Intentare copiar todas las estupideces que mi hermano decía. —Reí levemente. Ambos paramos de caminar cuando estuvimos dentro del comedor. —Nos vemos luego. —Extendí mi mano para que chocáramos puños, ya me había gustado hacerlo.

Levante mi vista intentando encontrar la mesa de Nick y Elías, pero no me hizo falta ya que alguien me llamo.

— ¡Matt! Ven aquí. —La mano de Elías se sacudía de un lado a otro, no lo dude ni un por un momento y me acerque a ellos. —Chicos él es nuestro compañero de cuarto. Se llama Elías y es chingon.

Una cosa que no se si les he mencionado, pero a Elías le encanta usar palabras de otros países.

—Hola, hermano. —Un rubio de ojos azules que parece sacado de una publicidad de Calvin Klein estiro su mano hacia mí y le di un pequeño golpe.

Me senté justo frente a Nick, al lado de Elías. Era algo incomodo, jamás había estado rodeada de varias personas, siempre fuimos Ashton y yo.

—Estábamos hablando de que el sábado va a ser el primer partido de futbol, siempre hacemos uno de bienvenida. ¿Te vas a probar en el equipo? Pareces muy delgado para eso. —El mismo rubio me hablo.

—Eh, en mi anterior escuela si hacia futbol. Pero me quebraron el brazo y no pude seguir por el momento, cuando me recupere decidí irme por otras actividades. Estoy anotado para el equipo de running y el de natación. —Conteste mientras sacaba mi almuerzo de mi mochila. Me había preparado una hamburguesa de vegetales, pero aparentaba ser una normal. Elías y Nick se habían burlado de mi alimentación bastantes veces.

— ¡Venga ya! ¿El equipo de natación y running? A mí no me engañas, seguro te metiste ahí porque esas actividades son compartidas con las chicas del instituto Blaked. —Elías golpeo mi hombro en forma de juego.

Pero dolió, auch.

—Sinceramente no lo sabía, pero creo que he sacado la lotería. Seguramente ustedes van a pasarla muy bien mientras se ven a ustedes mismos sudando, yo me quedo en la piscina con las del instituto Blaked en bikini. —Le di un mordisco a la hamburguesa. Los chicos en la mesa comenzaron a reír.

Punto para mí.

—Me agradas. Me llamo Sam Wilk. —Un chico que no había hablado se presento, este tenía el cabello color chocolate y sus ojos avellanas.

School Of Boys.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora