Tú, Sólo Tú

7.

Un enorme rollo de papeles impresos fue lanzado sobre la enorme mesa de madera, provocando un sobresalto en todos los presentes.

— Allí está el tema importante por el cual los quería a todos reunidos aquí... — señaló con molestia aquella pila de papeles y todos posaron su mirada en ella, más ninguno se atrevió siquiera a acercarse a los papeles — ¿no van a leer lo que se dice sobre ustedes? — los miembros se miraron entre sí, cabizbajos — oh... Supongo que Hyungwon los tenía al tanto de todo ¿no? — se rió con rabia y luego se detuvo enfrente del delgado — agarra uno Hyungwon...

El resto de los miembros miró la escena y sinceramente parecía intolerable.

Entonces Minhyuk decidió intervenir.

— Creo que si nos calmamos, las cosas pued... —el hombre molesto lo señaló para que guardará silencio y Hyungwon miró esa acción.

Entonces sonrió hacia su amigo.

— Esta bien Minhyuk, yo me encargo... — suspiró con nerviosismo, extendió su mano hacia uno de los muchos papeles que habían en la mesa y tomó uno sin mirarlo.

— ¿Qué pasa? — el hombre lo miró fijamente — ¿no vas a leer lo que dice allí? Anda Hyungwon, lee para nosotros, estoy seguro que todos estamos ansiosos por escucharte...

Se cruzó de brazos y Hyungwon agachó su cabeza sintiendo ganas de llorar al ver en primera plana su fotografía dándole un beso a Wonho, que menos mal no se distinguía.

— No voy a leer... — sollozó — no sé qué es lo que están diciendo, pero solo yo sé la verdad...

El hombre se rió y le dio una palmadita en el hombro.

— Eso es conmovedor... — suspiró con fingida melancolía — pero... ¿Sabes que más sabías? — Hyungwon no dijo nada — las reglas... ¡Las malditas reglas, joder!

Una lagrima resbaló por la mejilla de Hyungwon y de reojo pudo ver como Wonho estaba a punto de intervenir, pero no iba a permitírselo, no a él.

— Si, soy yo quien incumplió las reglas, entonces quiero que los demás miembros se retiren... — levantó su mirada con los ojos humedecidos hacia el molesto hombre.

Pero su petición fue ignorada, en cambio el hombre tomó uno de los papeles que estaban en la mesa y miró la foto con detenimiento.

— Es un hombre ¿no? — susurró y miró a Hyungwon — ¿Quién es?

Hyungwon lo miró inexpresivo y todos los miembros se tensaron ante la pregunta, pero antes de que alguno pudiera decir algo, Hyungwon respondió.

— Un amigo de la infancia... — todos lo miraron estupefactos, él de verdad estaba protegiendo a Wonho a toda costa.

Entonces el hombre tomó un papel y un lápiz y los puso delante de él.

— Escribe allí su nombre, apellidos y dirección exacta... — le acercó más el papel  que Hyungwon simplemente miró con los ojos desbordantes de lágrimas — uno de nuestros abogados debe hacer que lo que sea que estuviese pasando entre ustedes dos siga en lo oculto, no podemos arriesgarnos a que la prensa lo encuentre primero...

Se cruzó de brazos expectante y fue entonces cuando Hyungwon tomó el papel con sus temblorosas manos y luego tomó el lápiz sin saber qué escribir allí.

Sabía que no podía mentir, tampoco inculpar a nadie más, así que se detuvo por un momento a pensar.

— Soy yo... — susurró Wonho desde una de las últimas sillas de la enorme mesa, recibiendo una mirada más que sorprendida de parte de todos los presentes — yo soy el otro de la fotografía...