La adivinación es el arte de utilizar herramientas para entrar en contacto con la mente psíquica. Esta sencilla adivinación puede ser muy efectiva aunque use tan sólo la llama de una vela y un cuenco con agua. Para conseguir mejores resultados, realice este ritual por la noche, cuando esté solo.
Llene con agua un recipiente grande que no sea metálico. Colóquelo en su lugar para hacer magia. Si lo desea puede añadirle al agua unas gotas de colorante azul comestible.
Cargue una vela azul entre sus manos, visualizando cómo su percepción psíquica se desarrolla, crece y
se expande.
Ponga la vela en un candelabro. Enciéndala. Acerque la vela al recipiente de agua de forma que la llama se refleje en el agua.
Mire al reflejo de la vela.
Relájese. No se concentre: difunda su mente. Diga estas palabras una y otra vez hasta que hayan producido efecto: "Chispa, resplandor, la mente se oscurece; la clarividencia aparece ahora es la luz". Sabrá lo que tenga que saber.