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{1901-Birdy}

Ella era la chica de los ojos tristes

y las sonrisas destrozadas.

Te abrazaba con las manos frías

y decía que estabas helado.

Y era verdad,

siempre lo era.

Ella era la magia que se fundió

cuando los relámpagos

encendieron la noche.

Ella era la huella

que dejaban 

tus pies descalzos

sobre la tierra mojada.

Ella olvidó que somos humanos.

Y fueron los truenos

los que retumbaron

dentro de su cabeza.

Y fueron las lágrimas

las que ahogaron

su ataúd de sueños.

Las luces abrumaron

sus ojos.

Las sombras abrumaron

su alma.

Ella era verdadera,

como la niebla

de los días lluviosos.

Ella fue la primera

y se llamó Alétheia.

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