{People Help The People-Birdy}
Él era las lágrimas.
Era el chico de los cigarillos a medianoche
y las extenuadas historias sin final.
Él era el chico de las flores marchitadas,
el último verso de un poema estropeado.
Dejó que una sigilosa princesa
lo dibujara sobre una ciudad desierta.
Dejó que pintara sus demonios
sobre un lienzo rasgado.
Dejó que entonara la melodía
de sus anocheceres entre lágrimas.
Dejó que quebrara su corazón.
Dejó que creyera que estaba perdido.
Él veía sus ojos azabaches y sus tiernas sonrisas
en la chica que siempre perdía el autobús,
veía su cabello rizado cobrizo
en la chica que olía a tarta de chocolate.
Ella era la reina de sus demonios
y la razón de sus sollozos.
Se adentraba en un laberinto perdido,
en una cueva donde la única salida
era abandonarla,
a ella.
Olvidar las palabras que habían pronunciado,
dejar que los diablos emprendieran el camino de regreso
y la luna iluminara sus sombras.
Oscuras,
y frías.
Como él.
Él fue el tercero,
y se llamó Zareh.
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They say.
PoetryEllos dijeron que nunca estarían solos. Y la niebla inundó sus corazones.