Mi gran Apoyo

Semanas Antes

Hace pocos días, ya había empezado las clases en la escuela Forks High School, en Washington, Estados Unidos.

Éste es mi último año de secundaria en Forks, y ya quiero  tener todo listo, desde buenas calificaciones para graduarme sin problemas, y asi estudiar lo que me gusta, Literatura para ser escritora.

Pasaron un par de días del inicio de la segunda semana de clases, y todo iba perfectamente hasta que mis compañeras de curso, Briana, Dora y Tina, iniciaron con molestarme por mi color castaño claro de mi cabello, mi tez blanca, y por lo mediano de mi trasero y senos, sinceramente no se que les hice, que cuando llega la hora de estar en clases me miran feo, no me dejan tranquila, y todo lo que hago según su criterio, lo hago mal.

Al día siguiente cuando había llegado a la escuela, me dirigí a mi casillero, para colocar mis cuadernos en orden, y colgar mi chaqueta en la puerta de éste, cuando de momento fui abrir mi locker, encontré una nota que decía:

     "PÚDRETE CARTUCHA
            COME MIERDA"

—Ya que mas da-susurré para mí dando un suspiro.

De inmediato, después de leer dicho papel, lo arrugué, y lo boté a la basura, mientras colocaba mis cuadernos en orden para sacar mis cosas de música, Briana y sus amigas me veían con una expresión que ni yo sé que es, pero se nota su desprecio hacia mí.

Antes de entrar a la clase de música, saqué mis cosas, colgué mi chaqueta negra, así ya de una vez cerrando mi cubículo, caminé por el pasillo hacia mi sala, sin darme cuenta de que me seguían con cautela, aunque escuchaba susurrar detrás de mí.

Rato más tarde ví a un grupo de chicos populares, entre ellos estaba Mike el ex novio de Briana, un muchacho trigueño, de ojos celeste mar, delgado, bien parecido y por supuesto mi novio ahora.

En ese instante cuando lo ví, también me miró y sonrió hasta que de repente, alguien me hizo una zancadilla, me caí al suelo tirando mis cuadernos y libros sin querer.

—No te vayas a caer, Alexa-me profirió con sarcasmo, mientras, se reía con sus amigos, y percaté que mis compañeras se iban con el grupo al salón.

En ese mismo momento, me arrodillé y comencé a recoger mis cuadernos, libros y lápices, sin que nadie me ayude, pronto sería la hora de mi materia, asi que me levanté con mis cosas, y anduve un poco hasta llegar al lugar, miré mi reloj-pulsera, y eran las ocho a.m.  Segundos más tarde en Forks ya se escuchaban truenos, y una lluvia que no tardó en hacerse notar.

Entré a dicho lugar, ví que la profesora había llegado, y sin más, me fui a sentar en mi silla, empezando a colocar toda mi atención en la maestra, hasta que me comenzaron a llegar papeles a mi puesto, específicamente a mi mesa, distrayéndome lo leí, conteniendo un mensaje un tanto grosero.

"PARECES UNA MUERTA DE LO BLANCA QUE ERES, NADIE TE QUIERE, MOSCA MUERTA, LO PAGARÁS, COMO NUNCA TE LO IMAGINASTE"

Volví arrugar el papel y lo guardé para botarlo a la basura, así colocando mi atención nuevamente con la profesora.

Instantes más tarde, Mike se acercó hablar conmigo, sentado en él banco de al lado mío, sin poder simular mi sonrojo.

—Sabes amor, que lo del pasillo fue sin intención-me susurró al oído.
Y sabes también que con Briana, Dora y Tina, somos amigos, además estamos por cumplir los seis meses, y quiero que pasemos una velada adrenalínica. Añadió con un tono seductor.
—Sé que fue sin querer, pero debiste ayudarme a traer mis cosas-le arguyé con un tono pacífico y un suspiro al final, hasta cuando Briana interrumpió mi conversación con mi novio Mike.
—¡Pues tú no hacias eso conmigo Mike!-exclamó la rubia de tez intermedia.
—Dejanos  en paz, Briana tu tiempo ya pasó, aceptalo, nosotros somos amigos, y ahora Alexa es mi novia, ya sólo faltan unas semanas para que cumplamos los seis meses, ¿alguna duda de eso?, no lo creo- le explicó con un tono molesto, abrazándome, como señal de que no la tome en cuenta más que la clase.