Fifth Harmony Chilensis

Tshoa

*Este capítulo es un poco más serio (y muy Camren)*

*Camila POV*

Lauren estaba parada al otro lado de la pieza, mirándome fijamente.

Su pelo era un poco más largo, sus brazos se veían un poco más fuertes y sus ojos eran justo como los recordaba.

Bueno, excepto a que están bastante rojos ahora, desde que nos conocemos es una drogadicta culiá, pero ahora creo que se fue en volá con el queque mágico.

Intente acercarme un poco.

-Lauren. -empecé.- ¿cómo estas?

Me miro lentamente de los pies a la cabeza. O está muy volá, o de verdad le sorprende que yo esté acá.

-Como el pico. -contestó.- Primero me invitan a una casa culia gigante de una mina que con cuea conozco repleta de gente culiá que sólo sabe mi nombre. -Pausó un poco y escuchó el fuerte reggaetón de abajo.- Dinah culia. Bueno, después me puse a tomar como enferma para no aburrirme, un ahueonao con raftas me dió un queque que acepte porque estaba cagada de hambre y acabé más mareada que la mierda. Mis amigas están festejando abajo y me trajeron acá. En resumen, estoy sumamente drogada, estoy sola y puta, mira la hueá, estoy contigo.

Tenía una cara de orto que no se la quitaba nadie hueón, ¿tanto rencor me tiene?

-Lauren...-dije nuevamente.- Necesitaba hablar contigo. De verdad creo que es necesario que lo hagamos.

-No tengo ni una hueá que hablar contigo. -empezó a caminar hacía la puerta, pero le agarré el brazo.- Hueona, sueltame.

-No. -dije.- ¿Me podis contestar una hueá super simple?

Retrocedió un par de pasos y se soltó de mi. Dió media vuelta y estábamos mirandonos frente a frente.

-Sólo una. Adelante.

Suspiré.

-¿Porque chucha me tienes tanto rencor? Onda, yo sé que tuvimos nuestros mal entendidos, entiendo que te sentiste como el hoyo cuando terminamos, y yo también, pero...-respiré profundamente.- Pero pensé que ya lo habíamos solucionado. Intenté disculparme y darte tu espacio después de terminar, pero pareciera que fue peor, porque sigues actuando tan pesá conmigo. ¿Podis explicarme que hueá?

Me quedó mirando un poco, dentro de todas las neuronas muertas que tenía, algo de lucidez quedaba en su cabeza.

Su rostro ahora estaba bastante caído, demostraba tristeza.

-¿Te dai cuenta de lo fácil que te rendiste? ¿te dai cuenta de que te fuiste cuando más lo necesitaba? -ahora demostraba rabia, mucha rabia.- ¡¿Te dai cuenta de que terminamos y que altiro te metiste con el ahueonao del Mati?! ¿Pensai que no me dolio?

-Ah claro, ahora es mi culpa. -hueona chanta, la cagó. Me moví de mi lugar hacía la puerta.

-¿Te dai cuenta? Ahora te vas. Erís súper cobarde. Con razón te fuiste con ese hueón.

-Puede ser verdad...-empecé.- Pero mandale saludos a la Lucy. Era bacán verla yéndote a buscar después de los ensayos.

Cerré la puerta y me fui.

¿Que hueá le pasa?

Bajé al living, y me senté en el sillón mientras todos carreteaban.

Puta, igual me siento como el hoyo.

Era penca po, tenis las mejores intenciones del mundo pero lo ignoran porque viven en el pasado.

Siento que alguien se sienta al lado mío, era el Mati.