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[ t h r e e ]

[ f r a g m e n t o i i ]

La primera vez que sucede, Jeongguk ni siquiera piensa en ello. No piensa.

"¡Gukie!" grita Taehyung en cuanto entra por la puerta de su pequeña habitación compartida de la universidad. "¡Jeonggukie! ¿Estás en casa? ¡Jeongguk! ¡Adivina qué!"

"Qué", Jeongguk responde. Actualmente está tumbado en el sofá, intentando hacer energía para hacer la cena o para estudiar en su examen de biología o para hacer algo que no sea irse a la cama a las ocho p.m. como un fósil. Escucha los familiares sonidos de Taehyung quitándose los zapatos y dejando caer su bolso en el suelo, y luego, dos segundos después, Taehyung aparece en la entrada de la sala de estar. Está envuelto en un suéter blanco esponjoso, con las mejillas enrojecidas por el frío de septiembre. Su cabello es un desastre. Lleva pintalabios, rojo vino.

"Dije adivina", dice Taehyung, cruzándose de brazos. "Tienes que adivinar, Guk".

"Um", dice Jeongguk. "Viste un perro".

"Bueno, sí, y tengo algunas fotos muy tiernas para ti, pero no es eso".

"Finalmente encontraste ese lugar donde venden té boba que viste en un sueño".

Taehyung resopla. "No, y ahora lo que realmente pasó va a parecer decepcionante en comparación, pero sólo lo diré. Tuve la noche libre, y fumé el mejor porro de mi vida en el departamento de Hobi-hyung, y aparte compré helado en el camino a casa".

"Amigo", dice Jeongguk.

"Lo sé", dice Taehyung.

Veinte minutos más tarde, se acurrucan juntos en la escalera de incendios, pasando el porro de un lado a otro. En una gran oscuridad, de un otoño oscuro. Jeongguk sabe que se lo está imaginando, pero jura que puede oler el humo de la madera y las hojas podridas bajo la ciudad-olor a asfalto, maleza y orina. Mira de reojo y allí está Taehyung fumando, su rostro se ilumina de un color naranja-dorado por el fuego restante, y luego lo pasa de vuelta y hay una mancha roja en él por su labial, y por alguna razón eso hace que Jeongguk se sienta un poco descentrado, un poco inquieto. Cuando coloca el porro entre sus propios labios y respira, la sensación se profundiza.

Regresan al interior al cabo de un rato, cuando el porro ya ha desaparecido y el frío es suficiente para que sus dientes tiemblen. Jeongguk está en un nivel muy agradable de intoxicado. Caminar se siente como caminar con el agua hasta las rodillas, y todo es un poco más brillante de lo normal, un poco más divertido. Se deja caer en el sofá y parpadea, y luego Taehyung se deja caer a su lado, con una pierna en el regazo de Jeongguk, sosteniendo un envase de helado de chocolate y dos cucharas.

Dividen el helado como la marihuana, pasándolo de un lado a otro. Jeongguk mantiene cada cucharada en su boca hasta que se derrite por completo y luego chupa las chispas de chocolate hasta que también se derriten, agridulce en su lengua. En un momento dado, Taehyung pone Rurouni Kenshin y tratan de concentrarse, realmente lo hacen, pero Jeongguk sigue olvidando cada punto de la trama dos segundos después de que sucede, y Taehyung no puede parar de reír, por lo que silencian el televisor y simplemente se sientan allí, apoyándose el uno en el otro.

"Estás cálido", murmura Taehyung, acariciando su rostro contra el hombro de Jeongguk para encontrar una posición cómoda. "Siempre tan cálido. Apuesto a que es por todo el músculo".

Taehyung huele a naranjas. Jeongguk no puede seguir aguantando la respiración de esta manera, se está mareando.

"Tengo sangre caliente", dice.

"Como un lagarto en el sol", dice Taehyung.

"Sí".

Taehyung suspira, acurrucándose contra el cuerpo de Jeongguk. No es nada nuevo; Taehyung es mucho más cariñoso que Jeongguk, siempre abrazando y envolviendo y acariciando su cabello y pasando sus dedos sobre la espalda de Jeongguk. Él es un golden retriever en la forma de una persona. Es descarado, sobre el tacto y sobre todo lo demás, pero no de una manera feroz o agresiva. No es que se esté rebelando contra algo, es sólo que parece existir en un lugar que no ha sido afectado por la autoconciencia.

Jeongguk nunca ha conocido algo con lo que pueda concordar menos o que sea más fascinante.

"Hueles bien", dice en el cabello de Taehyung, con los ojos cerrados, a la deriva. Todo es cálido y cómodo, Taehyung un peso sólido contra su costado. "Como cítricos. Y vainilla".

Hay un largo momento en el que Jeongguk de verdad se queda dormido, quedándose dormido como las monedas caen en el agua: un guiño de luz, una gota, y luego se hunde. Siente más que lo que oye cuando Taehyung susurra algo en respuesta, labios rozando la camisa de Jeongguk.

Pero Jeongguk no puede distinguir las palabras. Y un segundo después, está dormido.

-

Se despierta en algún momento entre las tres y las cuatro de la mañana, y al principio no está seguro de por qué. Luego se da cuenta de que su brazo izquierdo está dormido y su pie derecho está muy frío, y le toma unos minutos ajustarse a la oscuridad antes de que Jeongguk descubra que ambas cosas pueden atribuirse a la forma en la que Taehyung está completamente encima de él.

La cabeza de Taehyung está sobre el pecho de Jeongguk, su cabello rozando la parte inferior de la barbilla de Jeongguk. Sus dedos están atrapados en la camisa de Jeongguk y está totalmente aplastando el brazo de Jeongguk. Él también está acaparando la única manta, por lo que la mitad de Jeongguk se está congelando y la otra mitad está caliente, desagradable y pegajosa con el sudor.

Esto no es ideal.

Jeongguk comienza a empujar a Taehyung, pero algo lo hace detenerse. Tal vez sea la forma en que las respiraciones de Taehyung son suaves y cálidas contra su clavícula. Tal vez sea el olor de su cabello. Tal vez sea la curva de sus dedos en la camisa de dormir de Jeongguk o la curva de su espalda en la luz amarilla que se filtra a través de la ventana, o tal vez sea una combinación de esos detalles y la propia pereza de Jeongguk, o tal vez sea otra cosa. Pero no importa lo que sea, Jeongguk no quita de encima a Taehyung. Simplemente se corre, con cuidado, como si estuviera moviendo porcelana en lugar de una persona. Se las arregla para sacar su brazo que se encuentra debajo del cuerpo de Taehyung y luego, sin ningún otro lugar para ponerlo, lo envuelve alrededor de la espalda de Taehyung.

Puede sentir la elevación y el desplome del pecho de Taehyung en esta posición, la lenta expansión de sus pulmones. El olor a naranjas está en todas partes, como si todo su apartamento estuviera lleno de ellas, un pequeño huerto brillante en medio de la ciudad.

Jeongguk respira hondo y vuelve a cerrar sus ojos.

A la mañana siguiente, se despierta solo. Y ni siquiera piensa en compartir el sofá con Taehyung toda la noche. No lo hace. No esa vez, y ninguna de las veces posteriores.

No lo hace.

💕💕

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