Pequeña Bailarina (Tiny Dancer). C R E E K

Un poema dedicado a Pablo Picasso

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"¿Espera, acaso no te dijo sobre el juego de esta noche?" Bebe pregunto, ambos rubios estaban ocupados acomodando algunos arreglos una tarde de un miércoles caluroso. Tweek sacudió su cabeza, frunciendo los labios mientras se concentraba.

"No." Dijo simplemente, ya que no tenía la más mínima idea sobre porque Craig no le había mencionado sobre su juego de béisbol. Por supuesto que había mencionado el hecho de que jugaba para el equipo de la estación policial en su primera cita, así que no era noticia nueva para él. ¿Tal vez pensó que Tweek no estaba interesado? Para ser honesto, no lo hubiera tomado mal, ya que, a Tweek realmente no le interesaban los deportes.

"¡Deberías venir! Clyde será el locutor ya que detesta correr."

"¿Él es... un policía? ¿Qué acaso no es eso, como, un requisito?"

"Digo, claro, pero, no le gusta hacerlo a menos que deba de." Bebe río, Tweek sonriendo ante eso.

"No lo sé..."

"¡Oh, vamos! ¡Sera divertido! ¡¿Qué acaso no quieres ver a tu hombre en esos pantaloncillos ajustados de béisbol?!" bromeó la rubia, Tweek rápidamente presto su atención hacia ella.

"¿Pantalones... ajustados dices?"

"¿Es que acaso... nunca has presenciado el milagro de los pantaloncillos de béisbol?" Bebe dijo lentamente, Tweek sacudió la cabeza. Bebe jadeó (de forma dramática, Tweek noto), tomo el IPad de la tienda, tecleando en el furiosamente. Se lo pasó a Tweek, urgiéndolo a deslizar entre las imágenes. El rubio admiró las imágenes, en cuanto se dio cuenta que los pantaloncillos de béisbol sí que le daban forma a uno.

"Oh." Exhalo, Bebe se mordió el labio.

"Y obviamente estas muy seguro del traseron que Craig se carga."

"¡Bebe!" Tweek exclamo, su cara tornándose rojiza.

"¡Solo digo! Creo que te divertirías mucho. Margot siempre se sienta a un lado mío, es un ángel de alegría." Explico la rubia, Tweek se mordió las uñas. Seria lindo poder sentarme con Margot así ella pueda conocerme más...

"Está bien." Dijo al final, Bebe elevo sus cejas.

"¿Está bien, qué, vendrás?" pregunto, sus ojos iluminándose un poco. Tweek echó un vistazo de nuevo hacia las imágenes que se proyectaban en el IPad.

"Claro que iré."

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Tweek, tomando en cuenta las lecciones de béisbol que Bebe le brindó está tarde, aún no tenía ni idea acerca de cómo era el béisbol. Lo único que sabía muy bien era, que estaba emocionado por ver la magia de los supuestos pantaloncillos de béisbol en Craig. En cuando hizo aparición en el campo de béisbol al cual Bebe le había dicho que fuera, Tweek no pudo evitar sentir una oleada de ansiedad sobre toda la situación. No fue invitado por Craig, sino por Bebe. ¿Qué si Craig no lo invitó por cierta razón?¿ ¿Qué si en realidad estaba viéndose con alguien más y le había invitado a ahí? ¿Qué si-

"¡Tweek!" El rubio salió de su estupor cuando escuchó a la rubia llamarlo, saludando desde las gradas. Tweek no puedo evitar sonreír ante la vista de la pequeña Margot, llevaba un jersey beisbolero, shorts, y una cachucha de béisbol, la cual era demasiados grande para su cabeza. El jersey prácticamente la tragaba, la prende llegándole hasta las rodillas mientras se levantaba y corría hacia su maestro.