Mine Just Mine

Capítulo 1

Siempre está mirándome, siento como su mirada me traspasa, me siento intimidada, no aguanto esto ya.

-Anastasia, quédate al final de la clase- no de nuevo, porque este profesor siempre me tiene que dejar hasta que todo el mundo se valla?, estoy cansada.

Es mi profesor de matemáticas, soy bastante buena en esta materia, pero siempre me hace quedarme para discutir mis exámenes, siempre llego tarde a mi casa por su culpa, siempre me mira medio extraño y no me da confianza. Él es bastante apuesto, pero tiene ese algo que lo hace verse medio psicópata. Tiene su pelo medio largo, es alto y parece como si hiciera mucho ejercicio. Algunas chicas, mejor dicho la mayoría de las chicas que toman su clase tienen una fantasía con él. A mi nunca me a inspirado confianza así que siempre he tratado de tener distancia, pero últimamente me llama para discutir cosas que ya sé, pero según él debo practicar.

Ya es hora de salir del salón así que trato de salir rápidamente sin que se de cuenta, pero para mi mala suerte se para en la puerta para hablar con un profesor que llegó, intento salir con la multitud pero fue inútil siento algo que jala mi bulto y es mi profesor, me mira con una cara de te dije que te quedaras, mientras sigue la conversación con el profesor de física.
Ya que no tenía opción me acomodé en uno de los asientos vacíos. Él termina de hablar, me mira y procede a cerrar la puerta de tras de él.

-Lo siento profesor pero debo irme, ya mis padres se están molestando porque llego tarde a mi casa.

-Oh pero solo van a ser 10 minutos, después puedo llevarla a su casa para que no se le haga largo el camino.

-Lo siento profesor, pero no lo creo conveniente, y ademas entiendo perfectamente el tema que está dando, no entiendo porque me tiene que hacer repasar cosas que ya sé.

Me mira y me sonríe, va dando pasos cortos hacia donde estoy, su sonrisa me da nervios, trago ondo y espero que no lo haya escuchado. Queda al frente de mi y me hace una seña de que me siente. Lo hago y el hace lo mismo.

-Eres una mujer muy inteligente, por eso me interesé en ti- que acabó de decir?- te he estado observando Anastasia, eres el tipo de mujer que todos quisieran pero no te das cuenta, eres hermosa, quisiera tenerte para mi, no sabes cuanto deseo estar contigo- pone una de sus manos en sima de la mía pero la saco inmediatamente.

-Que dice? Como se atreve a decir esas cosas, eres mi profesor, porque dices esas cosas?!- alzo un poco mi voz pero trato de calmarla.

-Lo siento Anastasia, pero intente de no fijarme en ti, y lo intente demasiado, cada día viéndote era una tortura para mi, así que no lo pude evitar, solo quisiera que me entendieras y me ames como yo lo hago- me paro de cantaso y trato de llegar a la puerta, pero él me agarra del brazo y me empuja hacia la pared- porque te quieres ir?- me susurra a mi oído- estoy confesando mis sentimientos deberías de escucharlos y no correr.

Esta muy cerca de mi cara, le miro a los ojos y estos me hipnotizan, tenía sus ojos negros clavados en mí. Mire sus ojos pero estaba tan cerca que por instinto le mire sus labios, eran gruesos y con un tono rosado. Se dió cuenta que mire sus labios y procedió a mordérselos y estos obtuvieron un tono rojizo.

-Quieres besarlos?- me preguntó, yo despegué mi mirada de sus labios para después mirar sus ojos- yo también tengo muchas ganas de besar los tuyos- estaba atontada por su mirada tan seductora, pero pude despertar y darme cuenta que lo que él quería hacer estaba mal, ya que era mi profesor.

-Que dices?, déjame puedes soltar mi mano y dejarme ir?- le dije ya que sostenía mi mano izquierda y estaba impidiéndome moverme ya que estaba casi enzima de mi- por favor

-Esta bien, pero te dejare ir si me permites llevarte a tu casa- no era buena idea que el me llevara, iba a saber donde quedaba y eso no era conveniente para mi- sino pues podemos quedarnos otro rato mas y contarte las cosas que quisiera hacerte.