you're gay ➳ wonki

El trabajo de Hoseok.

Kihyun se dejó caer sobre la cama agotado, se acurrucó contra el cuerpo desnudo de su novio, dejando un beso sobre su pecho. Ese día ambos habían decidido saltarse sus clases para aprovechar el tiempo en cosas más divertidas, como había dicho Hoseok para convencerlo, y en realidad no tuvo que insistir mucho, el menor ya extrañaba el cuerpo de su novio. La suerte los acompañó ese día, pues Hyunwoo y Minhyuk salieron temprano para sus clases, Kihyun se sintió feliz por ello, odiaba tener que reprimir sus gemidos.

Se quedaron en silencio, solo abrazados, disfrutando el calor del otro. Pasaron unos quince minutos hasta que oyó la puerta principal, y luego el grito de Hyunwoo anunciando su llegada. Entonces un pensamiento llegó a la mente del pelirosa.

–Hoseok...

–¿Mh? ¿Qué pasa? –Hoseok se giró para mirar a su novio, acariciando la mejilla del menor con su pulgar.

–¿Por qué le diste tu número a Hyunwoo en el bar?

–E-eh...por mi trabajo.

–¿En qué trabajas? Recuerdo también que le diste tu número a un chico en la biblioteca.

–No es nada extraño si es lo que estas pensando.

–Hoseok, le das tu número a desconocidos, no sé qué pensar al respecto. –Kihyun se sentó sobre la cama, cubriendo su parte inferior con las sábanas.

–Está bien, te lo diré. –Imitó la acción del menor, sentándose cerca de él, dejando un beso sobre su hombro desnudo. –Trabajo en una empresa de entretenimiento, tiene cantantes, modelos, actores y todas esas cosas. Yo prácticamente soy el que les sirve café a todos, pero si tu llevas a alguien que pueda convertirse en modelo o actor, o sea chicos guapos, te dan pago extra si los chicos firman el contrato.

–Ya veo...¡Espera un momento! –El menor se giró para mirar a su novio con una expresión molesta. –¿Encuentras a Hyunwoo hyung guapo?

–Si. –Contestó, arrepintiéndose de inmediato al ver la expresión del pelirosado. –Es decir, no, esa cosa horrible, pero tiene toda la pinta de ser modelo.

–¿Y por qué no me lo ofreciste a mi?

–Bueno...no cumples los requisitos, eres algo bajo. –Bromeó.

Kihyun miró completamente indignado al mayor, se levantó de la cama molesto y buscó su ropa por el piso para colocarsela, mientras Hoseok intentaba convencerlo de volver a la cama.

–Eres un idiota, Shin Hoseok. –Habló Kihyun terminando de ponerse la camiseta.

–Bebé, no es que piense que eres feo. Eres precioso, pero al dueño no le gustan chicos bajitos. –Entonces una almohada impactó contra el rostro de Hoseok.

–¡Te quedarás dos semanas en abstinencia! –Gritó Kihyun enfadado y salió de la habitación.

–¡Pero bebé! ¡No es mi culpa! –Respondió el mayor para luego vestirse e ir en busca del menor.