Capitulo 1

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Temblores. Todo mi cuerpo estaba bajos unos molestos temblores que hacían que mis labios y mis muñecas hiciesen violentos aspavientos. Mi respiración hacía que los pulmones me ardiesen y que cada gota de sangre que mi corazón dirigía se volviesen molestas y asfixiantes. Un sudor frío que recorría cada vez más rápido mi cuerpo comenzó a empapar la empalagosa colcha de flores que estaba perfectamente extendida sobre mi cama. Mi mano buscó el pequeño bote que contenía las píldoras y con una mano tambaleante cogí y,acto seguido, ingerí una de esas cápsulas que llevaba tatuados unos cuantos números. Respire profundamente y me deje caer sobre la cama. Siempre que no me tomaba la medicación eso sucedía, pero no era más que unos sarcásticos efectos secundarios. A lo mejor lo hacían para que, así, la compra de esta medicina fuese obligatoria. pero eso no era nada malo comparado con lo que pasaría de no ingerirlas.

arsénico y caféDonde viven las historias. Descúbrelo ahora