Virus

Capítulo 2: Epocalipsis

Me desperpertaron los gritos de la gente,

los claxon de los coches que debido a los atascos para salir de la ciudad, no paraban de sonar.

Me levanté despues de pasar una dura noche y me fuí a la habitación de mi hermana, pero no estaba.

-¿pero a dónde había podido ir?-pensé preocupado.

Rapidamente me fui a la cocina y vi que mi móvil estaba vibrando, era un mensaje de ella, de mi hermana. Que decía:

"He ido a visitar a mamá y papá, no te preocupes llegaré sana y salva. De paso tambien compraré algo de comida".

Eran ya casi las 12:30 y mi hermana aún no llegara al hotel y eso que llevaba desde las 10:00 despierto, esto comenzaba a ser aburrido.

Unos minutos despues empezaron a golpear la puerta, era la policía.

-Sal ahora mismo de aquí, tenemos que evacuar la ciudad-Dijo un extraño policía seriamente.

-No, yo de aquí no me voy sin mi hermana-Le respondí con tono de amenaza.

-La tenemos con nosotros, ella nos ha dicho que te vinieramos a recoger aquí-Dijo el policía mientras salíamos del hotel.

Nos dirijimos al coche de policía, tenía la esperanza de que mi hermana estuviera en el asiento trasero de ese coche, pero no estaba.

-¿Se puede saber a dónde vamos?-Le pregunté al policia intrigado.

-A un refugio que está a un par de horas de aquí-Me respondió con seguridad.

Despues de hacerle esas preguntas me pasé todo el camino callado, pero aun tenía muchisimas preguntas por hacer y no sabía donde tenían a mi hermana...

LLevavámos casi hora y media de autopista y aún no llegáramos a ese tal "refugio". Yo creía que el policía no sabía llegar a ese sitio debido a que no paraba de mirar el GPS del coche todo el rato.

De repente una persona cruzó por la autopista y chocamos con ella.

(Muchos días después)

Me desperté en el bosque, cerca de la autopista, estaba débil, herido, no me acordaba de nada de lo que había ocurrido. Aún me encontraba en el coche patrulla, estaba todo roto, lleno de cristales y en el asiento de delante ya no estaba en policía. Me decidí a salir para ver los alrededores, y allí, tirado en el suelo estaba el policía, muerto y con una mordedura en el hombro izquierdo. Tenía su pistola (USP-45) en la mano y la cogí para protegerme, seguí explorando hasta que oí unos ruidos raros. Era el policía que se estaba despertando, estaba lleno de sangre, ojos rojos y piel algo rasgada.

-¿Qué nos ha pasado?-Le pregunte con algo de miedo.

Él no me respondió y me tiró al suelo para intentar atacarme, no sabía que hacer, asíque le disparé en la pierna y aún seguía vivo. Con todo el ruido que hice, otras dos especies personas como él se acercaron a donde estábamos les disperé a todas en la cabeza y acabaron los tres en el suelo. Cada vez se acercaban más de esos monstruos a donde yo estaba, asíque decidí a subir a la autopista.

Estaba llena de coches, pero algunos no tenían a gente dentro, busqué por un coche que tuviera gasolina y sobre todo GPS para no perderme. Ah, que no os lo había dicho, estaba estudiando para mecánico, me apasionaban lo coches y por eso entendía tanto de ellos.

Tenía el coche, pero me faltaban las llaves estuve como casi cinco minutos buscando por ellas hasta que las encontré, estaban en la guantera del coche. A pesar de tener diecisiete años cumplidos estes mes, ya sabía conducir porque mi padre me daba clases todos los fines de semana entonces,

coloqué la dirección en el GPS, arranqué el coche y me puse camino al refugio.

Durante todo el camino no salían de mi cabeza mis padres y mi hermana, estaba muy preocupado por ellos, solo quedaban diez minutos para llegar al refugio según el GPS. Esos diez minutos se me hicieron eternos, pero sabía que cuando pasaran podría ver a mi hermana Julia. Y así es, después de que ese tiempo pasara, llegué al refugio.