● more than that

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  ➤ Valentina and Juliana; tops. 

—No, Lucho, no tengo ganas de salir. — Comentaba en voz baja la joven castaña.

—Solo será una noche, nena, verás que vas a divertirte, ¿Si? — Insistía, era como una garrapata intentando succionarte, ¿Tenía algún sentido eso?

—Los clubs no son seguros, y sabes que...

—Tu familia tiene la regla de salir con guardaespaldas bla bla bla. — Suspiró el muchacho, estaba irritado. — Siempre es lo mismo, Valentina, no sé en qué momento comenzaste a ser más aburrida. Además nuestros amigos estarán ahí y sabes que somos los mejores tirando fiesta, donde sea.

Los orbes celestes de la chica analizaron un momento a su pareja, y es que en cierta parte él tenía razón, ¿En qué momento de su vida comenzó a ser más aburrida? Quizás desde que ya no encontraba sentido a ese noviazgo, sin embargo la costumbre la mantenía junto a él como un imán. O desde la muerte de su padre, esto último le produjo un nudo en la garganta, dolía cuales espinas clavándose en tu piel... Como cuando era niña e intentó cortar con sus propias manos una rosa de los rosales de Silvina, para obsequiárselo a su madre... Sin darse cuenta unas lágrimas se deslizaron sobre sus tersas mejillas, inmediatamente pasó una mano sobre ellas, limpiándolas.

—¿Entonces, Vale?

—Está bien... vamos, dame un momento e iré a ponerme algo mejor.

Lucho soltó una risa traviesa junto con esa sonrisa arrogante, se acercó hasta la castaña hasta pegar su cuerpo a ella. —Puedo ayudarte a quitarte esa ropa. —

—No, Lucho, seguro nuestros amigos estarán cansados de esperar, así que mejor me apresuro. — Se levantó del sofá con rapidez, como la cercanía de su novio quemara, y subió a su habitación, mientras dejaba al muchacho algo desconcertado.

●●● 

Minutos después Valentina y Lucho estaban en camino al club, por obra de algún milagro logró convencer a Eva de salir sin guardaespaldas, suponía que ella entendió que necesitaba un poco de privacidad con su novio.

Escogió un cómodo vestido negro que llegaba hasta las rodillas, era holgado de la cintura abajo, y ajustado hacia arriba, mientras que su espalda estaba descubierta con un listón de cada extremo detrás de sus hombros para ajustarlo. Dejó suelto su cabello con una ligera capa de maquillaje.

Al llegar, se bajaron del auto y se dirigieron dentro, donde ambiente un ambiente lleno de alcohol y música pop o electrónica ya había iniciado, después de todo la hora apuntaba la una y treinta de la mañana. Las personas bailaban en cualquier rincón de ese club, la pista estaba llena. Por lo que tuvieron que esquivar a unos cuantos para llegar hasta una de las mesas que estaban apartadas, ahí se encontraba un grupo de amigos, bebiendo y otros probando una fina línea de polvo blanco, después de todo eso hacían los chicos universitarios, ¿No es así? Era una forma de darle la bienvenida a los 20 años, o eso quería entender Valentina.

No dudaron en unirse a ellos, todos los retaban a tomar un shot de tequila, lo cual lo aceptaron, pero la castaña desistió a inhalar de aquel polvo blanco, no se sentía animada para hacerlo, la depresión parecía querer apoderarse de su cuerpo, de su mente.

Pasaban torturosamente los minutos, Valentina ya no lo soportaba, estaba cansada, irritada y triste, Lucho parecía no entender; toda su atención estaba en sus amigos, el alcohol y las drogas.
Se encogió en el sofá de cuero donde no se había despegado desde hace dos horas, estudiando cada rincón del club, a las personas que bailaban sin cesar.

Sus ojos dieron con un grupo de personas que se encontraban en el otro extremo de la pista, ellos estaban en una mesa, con sofás de cuero alrededor. Pero algo pareció llamar su atención de ahí, ¿Una chica? ¡Ella realmente la estaba mirando! Que atrevida, se supone que debía apartar los ojos, ¿No es así?

girls like girls » juliantina ; one shots.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora