1-"recuerdos"

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Recuerdo estar sentando en una silla, recuerdo recibir una llamada, recuerdo haber visto a mucha gente llorando Y preocupada, recuerdo tomar tu mano y decirte "te amo", recuerdo ver cómo cerradas los ojos para no despertar más.

Me desperté transpirando como siempre, con la respiración agitada y el corazón a mil, el mismo sueño de siempre. Me levanté de la cama y fui al baño a darme una ducha, los recuerdos de Kate siempre estás en mi cabeza como si solo hubiera pasado un día pero en realidad a pasado un año. Aún tengo la esperanza de que ella despierte a mi lado o abrazarla una vez mas pero todas esas iluciones se van cuando veo todas las cartas de pesame con su urna y su foto junta a ella.

Hoy fue un día como los de siempre, estube medía hora leyendo una historia junto a su urna, fui a de compras para mí merienda, le di de comer a mis gatos Tommy y Jack, comí, llore, estube acostado en mi cama pensando en ella y luego volver a dormir.

Al día siguiente me desperté con el mismo sueño pero esta vez no llegue al final por el sonido de mi celular, mis padres me estaban llamando.

–Si– respondí un poco desanimado.

– Tate, ¿Cómo estás hijo?– Preguntó mi madre.

– Cómo siempre, triste– Le respondí a mi madre con lágrimas casi saliendo de mis ojos.– ¿Necesitas decirme algo?

– Solo quiero informarte que hoy tienes cita con un psicólogo.

– Mamá ya te he dicho que no necesito a un psicólogo– Le respondí un poco molesto–

– Tate te espero a las 12 en punto en el hospital, no llegues tarde– antes de que pudiera responderle y negarme me cortó y no tuve más remedio que ir–

Al llegar al hospital me dieron ganas de llorar, recordé todo lo de mis sueños. Ví a mis padres que estaban sentados en una sala de espera, mi madre y padre me saludaron con un fuerte abrazo, me limité a responder, me senté a su lado y unos minutos después me llamaron. Me levanté y camine por el pasillo hacia la oficina del psicólogo. No negare que cuando estaba caminando solté algunas lágrimas. Entre a la oficina y ví a un joven con cara amable y come asiento.

– Bien Tate Brown, ¿cómo te encuentras este día?– Lo mire y respondí–

– Bueno, estoy como siempre, vacío, sin ganas de nada y deprimido– mientras hablaba con el mira a todas partes exepto a el–

– Bueno Tate, me gustaría saber mucho más a fondo por qué estás aquí, así que ¿Me podrías decir?– Lo pensé dos veces antes de decirle, pero que más remedio tiene–

– Hace un año atrás mi novia murió en un accidente de tránsito y me siento culpable por eso, y además antes de todo eso me diagnosticaron con depresión.

– ¿Y por qué te sientes culpable Tate?

– No quiero hablar eso– en realidad si quería pero no quería llorar en frente de el–

– Está bien, no te obligare a hablar si no quieres.

Estuve casi una hora hablando con el psicólogo pero no encontré que me podía desahogar con el, en conclusión fue una perdida de tiempo. Luego de eso fui con mis padres a comer y a unas tiendas para comprarme ropa. Esta era la primera vez en mucho tiempo que pasaba tanto tiempo fuera de la casa, no estaba mal pero extrañaba estar junto a Kate o mejor dicho a su urna.

quedate siempre conmigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora