Yo.

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Nuevo día para tener que ir a esa prisión de casi 9 horas, que horror, sólo de pensar que tengo que ir me da aún más pereza.

Me despedí de mi madre y salí de la casa rápidamente, ésta vez me tenia que ir solo pues Steve no iba a poder venir por mi y llevarme, me dijo que tenía unas cosas que hacer en su trabajo.

Iba caminando con rumbo a la escuela cuando derrepente escucho un claxon de un auto.

-Sube- escuché salir una voz del auto.

Era Betty que iba al colegio con Mike, su novio.

-Hola a los dos, y gracias por llevarme- dirijo la mirada a Betty y le sonrío.

-No hay problema, ¿Steve no pudo ir por ti- me preguntó.

-Nop, me dijo que tenía unas cosas que hacer, pero dijo que en la tarde ya estaría libre- contesté.

-Bueno, fue una suerte que te viera y vinieras con nosotros ¿Verdad Mike?-

-Si, supongo- la verdad no sé si yo le caigo bien a Mike o no, puede ser que simplemente sea callado.

Cuando llegamos al colegio Mike fue con su grupo de amigos y yo entré junto con Betty porqué nos tocaba la misma clase, así que fuimos juntos.

Al primero que vimos al entrar al salón de clases fueron a los estúpidos, Aaron y sus amigos.

-¿Dónde está tu novio maricon? -dijo Aaron acercándose a mi-, ¿Ya no está cuidandote como siempre?

-Déjame en paz por favor Aaron, no quiero pelear- lo empuje para ir a mi lugar.

-Uy, que hombrecito resultaste, pero sabes que nunca serás nada de eso, ma-ri-con-

Me habia hecho enojar, así que me giré a verlo, quedando cara a cara, le solté un golpe en la cara lo más fuerte que pude. Cayó al piso.

-¿Qué te pasa imbécil? ¿Te crees muy gracioso?- me dijo levantándose.

-Ser gay, no significa que no me pueda defender, recuerdalo-

Se abalanzó contra mi, caímos al piso del salón de clases, todos gritaban, y Betty intentaba separarnos. Seguíamos peleando, pero la directora entró al aula, alguien le habia avisado, ella entró y nos separó para luego decirnos:

-Jóvenes, ¿Qué es lo que les pasa? Esto es un salón de clases no un ring de lucha libre, los dos van a tener que acompañarme a orientación para levantar una circular- dijo la profesora enojada.

Tirandonos miradas de odio Aaron y yo mientras caminabamos junto a la directora, la maldita llegó justo cuando casi ganaba, prácticamente Aaron fue salvado por la campana, en este caso la directora.

Levantaron un reporte para ambos, llamaron a nuestros padres y nos suspendieron 3 días, me esperaba una larga charla en casa.

✰Venus✰Donde viven las historias. Descúbrelo ahora