Psychic Cat

Capítulo 02

Capítulo 02

Metas

Ambos amigos suelen caminar seguidamente por las calles centrales de la ciudad en donde habitan normalmente por las tardes, ya que disfrutan más de ese momento al contemplar la puesta del sol mientras discuten algunas ideas que tienen en mente.

Antes de que se pusieran a conversar, ambos gatos suelen saltar a un techo alto de una casa y es ahí en donde pueden disfrutar más del momento acogedor al sentir la dulce brisa y el cálido atardecer rondando por sus suaves pelajes.

— Dan, ¿Tienes algún objetivo en mente? —Pregunto Shil sin dejar de ver el atardecer—

— Sí, varios. —Contesto Dan— Quisiera volar, lograr quitarme un pedazo de pescado de los dientes, derrotar a un perro... y si fuera posible, encontrar a una gata especial.

— Raras y poco probables metas... —Dijo Shil mirando a su amigo con una mirada confusa pero a la vez alegre— ¿Y por qué no alguna meta relacionada con el poder psíquico que tienes?

— Este poder no me sirve para casi nada en realidad. —Contesto Dan— ¿Cuándo me has visto usar estos poderes raros para una situación extravagante? Sin estos poderes mi vida sería casi igual, así que me concentro mayormente en lograr metas que pueda cumplir siendo yo mismo con mis propias habilidades y no de un origen desconocido.

— Lo de querer volar podrías hacerlo usando tus poderes psíquicos haciéndote flotar a ti mismo. —Dijo Shil animándole a su amigo— Lo de quitarte aquel pedazo de pescado de los dientes podrías quitártelo extrayéndole concentradamente con la ayuda de algún palillo pequeño usándolo a través de tu poder psíquico. Derrotar a un perro podrías hacerlo fácilmente con la ayuda de ese poder que tienes. Y lo de conseguir a una gata especial pues... Eso es algo complicado.

— Los poderes psíquicos solo hacen las cosas mucho más fáciles y con la ayuda de eso uno se puede llegar a creer superior... Pero eso de que sirve. Si al fin y al cabo todos tenemos habilidades que otros no poseen. Por ejemplo, yo admiro tu gran habilidad de poder encontrar comida exquisita fácilmente, ese olfato tuyo es muy bueno. Y yo apenas encuentro un atún en un estado promedio.

— Creo... que tienes razón. –Dijo Shil viendo como el cielo empezaba a oscurecerse—

— Creo que deberíamos volver. —Dijo Dan mirando el cielo algo tímido— Da la sensación de que va a llover pronto.

— De acuerdo... —Dijo Shil suspirando— Pero, ¿Podrías mostrarme una vez más lo de tu poder psíquico?

— ¿Estas obsesionado con mi poder o que te pasa? —Pregunto Dan—

— Si solo apreciaras más el increíble poder que tienes verías lo asombroso que es.

— Quizá, pero me gusta mi manera de verlo. Y si tanto anhelas verlo te daré una demostración rápida. –Dijo Dan elevando con su poder psíquico una lata de acero botada en el suelo. Esta empezó a dar volteretas por el cielo y al poco rato Dan empezó a flotar también dándole una demostración asombrosa a su amigo— Admito que resulta increíble, pero ya me acostumbre a ello.

— Bueno, gracias por la demostración. Ahora sí, volvamos a nuestros refu...

Shil estaba a punto de terminar su oración, pero un gran estruendo resonó por el cielo haciendo que ambos gatos se quedaran callados. Hubo un momento de tensión y, sin que alguno de los dos gatos se percatase, un trueno cayó dirigiéndose a la lata que estaba alado de Dan dándole este impacto al gato provocando que cayera inconsciente al suelo.

— ¡D...Dan! –Exclamo Shil—