Come Back •Roger Taylor

•6•

           

Me quede dormida hasta que la nada escuche mi ventana abrirse así que decidí levantarme a ver qué pasaba quizá no la deje bien cerrada.

-Pero ¿qué haces aquí?  – pregunte casi gritando al ver que Roger estaba en mi cuarto

-No grites, solo estaba de paso – dijo sonriente como si nada

-Roger, eres un maldito lunático – dije mientras lo golpeaba

-Oye quieta – dijo alejándose

-Debes irte – dije enojada

-Pero acabo de venir – dijo viendo mi cuarto – linda habitación, por cierto

-Si no acostumbro a recibir torpes chicos que entran como si nada ¡CUANDO ESTOY DORMIDA! – exclame – ¿siempre haces esto? – pregunte

- ¿Hacer qué? – pregunto mientras se sentaba en mi cama

-Entrar en el cuarto de alguien – dije seria – Te das cuenta que son las dos de la madrugada

-Primero si eres la primera – guiño el ojo – y segundo ya lo sabia

- ¿Debería sentirme especial? – pregunte jaloneando su cabello

-Supongo que sí, deja mi cabello – dijo quejándose – me cuesta mantenerlo así – lo acomodo

-Eres un idiota, debes irte – dije mientras señalaba la ventana

-No creerás que bajara por ahí – dijo confundido

- ¿Querías ir por la puerta? – pregunté riendo – No desde ahí subiste desde ahí bajas – dije sonriendo

-Lo que uno hace por el amor – dijo levantándose

-Adiós Roger – dije despidiéndome

- ¿Ni un beso? – pregunto triste

Lo vi mal.

-Creo que es un no – dijo mientras abría la ventana

Camine hacia la cama, ahora veré si puedo conciliar el sueño.

- ¿No creías que me iría sin uno verdad? – dijo mientras tomaba mi cintura y besaba mis labios

Trate de parar el beso, pero el simplemente tomo con fuerza mi cintura mientras trataba de abrir mis labios ya que estaba comprimiéndolos, hasta que cedí. Jamás pensé que besaría a Roger, al idiota de Roger. Seguía besándome tiernamente hasta que me dejé llevar, puse mis manos en su cara para acercarlo más a mí y el seguía con las manos en mi cintura y sentía como poco a poco iban bajando.

-Creo que ya tienes que irte – dije separándome de el con los ojos aun cerrados

Sentía su respiración en mi cara, no sabía qué hacer. ¿Debía dejar que se quede o dejarlo irse?

-Nos vemos – dijo dándome un pequeño beso y alejándose mientras salía por la ventana – Creo que deberías cerrar, cualquiera podría entrar – dijo riendo y guiñando el ojo

-Adiós – dije mientras sonreía y mordía mi labio

Cerré la ventana y vi cómo se subía a su camioneta dándome una ultima mirada.