Quien es él?

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Me desperte algo sudada, estabamos en verano y eso de dormir pegado a alguien con este calor no es lo mas recomendable. Me safe de la mano de Scott saliendo cuidadosamente de la cama para no despertarlo, tome algo de ropa de mi bolso, eso me recordo que aun debia desempacar y me encamine al baño. Una vez dentro deje mi ropa, prendi la ducha y mientras esperaba que el agua calentara me saque los anillos, pulseras, los aros y collares que habia olvidado quitarme la noche anterior. Me quite el pijama y me meti bajo la lluvia artificial, sentia como cada musculo de mi cuerpo se relajaba y dejaba fluir una sensacion de alivio. Pasados unos treinta minutos sali del baño en shorts y una blusa de tirantes, peine mi cabello y lo ate en una coleta, algunas mechas caian por mi cara pero no me importaba no tenia que ir a ningun lado, no valia la pena desperdiciar tiempo en arreglarme. Me decidi por desempacar y acomodar mi cama, tome la maleta de una esquina del cuarto y la lleve al armario que estaba repleto de estantes, perchas y cajas, era perfecto, encontre un lugar especifico para cada una de mis cosas, fui hasta el escritorio donde tome del primer cajon una caja con papeles pequeños y una lapicera. Etiquete todos los compartimentos del armario para saber exctamente donde dejaba todo, puse la maleta en un compartimento sobre los abrigos y cerre la puerta. Me dirigui a mi cama cuando encontre que mi hermano seguia durmiendo muy placidamente, seria una pena que alguien lo despertara, asi que como buena hermana me arroje sobre el, no consegui respuesta alguna asi que me coloque paralelamente a el para que sintiera todo mi peso sobre el, pero no hubo caso, no se movia, probablemente me movia mas yo al ritmo de su respiración.

-Scott es tarde! tienes que levantarte- Grite en su oido, a lo que consegui que el solo moviera su cabeza hacia el otro lado.

-Alex callate, quiero dormir- Sonaba cansado, si embargo este era mi cuarto.

-Por que no vas a dormir a tu habitación? Ahi podras dormir todo lo que quieras- No podia quedarse todo el día durmiendo en mi cama.

-Vamos Alex por favor!- Sabe como convencerme el desgraciado.

- Okey, pero solo por un rato- Me quede sobre su espalda, de alguna forma el vaiven que producia su respiración me ralajaba, poco segundos despues el sueño me alcanzo.

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Soñaba con un campo lleno de flores donde yo era la recolectora de las mismas cuando mi madre entro presipitada al cuarto.

-Alex! Scott! Que hacen acostados! Los quiero a ambos arreglados en la cocina en cinco minutos!- Su tono era firme, pero sabia que ella no estaba enojada, nunca lo estaba. Con el rabillo de mi ojo divise una figura junto a la de mi madre, que al ella marcharce le siguio. Me levante y observe como las marcas de la remara de Scott habian quedado en mi rostro como pequeñas arrugas, sarandee un poco a mi herman y termine por empujarlo de mi cama. El se levanto y fue a su habitación, yo pase al baño de la mia, me lave la cara, los dientes y sali de mi cuarto, a todo esto Scott se encontraba parado en el marco de su puerta prendiendo un boton de su camisa.

- No querras bajar asi- Dijo sin siquiera mirarme.

-Por que no? Que hay de malo?- Frunci el seño esperando una respuesta.

- Hay visitas- Dijo sin mas y bajo la escalera.

Volvi a mi cuarto en busca de algo mas apropiado. Me puse un vestido por encima de la rodilla, era uno de mis vestidos favoritos, era suelto, con tirantes, tenia un color celeste que simplemente me encantaba. Me puse mis zapatillas, recoji un poco mejor mi cabello y baje las escaleras.

LLegue a la entreda de la sala para encontrarme a mi padre y hermano sentados en un sillos, mientras que mi madre sosteni una bandeja con limonada frente a una persona que no lograba ver ya que me encontraba a sus espaldas.

My rulesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora