《¿Qué es el Amor?》 [King Dice x Lectora]

~Tratando con el Diablo~

[POV S/n]

Varias personas rodearon la mesa de dados, en ella dos personitas que te parecieron muy familiares estaban jugando con una sonrisa en su rostro. ¡Son los hermanos taza! Dices en tu mente. Al parecer iban en una racha ganadora, en ese mismo instante sentiste una presencia a tu lado, mirando fijamente el juego, es el mismo que se puso a tu lado en la máquina de Pinball.

"¿Son muy buenos, no?" Dijo éste poniendo una sonrisa mientras te mira.

-¡Son realmente buenos! Respondes. -¡VAMOS CHICOS USTEDES PUEDEN! Gritaste animando a los hermanos taza.

De pronto, un ser sale de las sombras haciendo que el casino se quede completamente en silencio, éste lo rompe dando una pequeña risa.

"¡EXCELENTE JUGADA LA DE USTEDES! ¿Qué tal si aumentamos las apuestas? Sugirió sonriendo.

Los hermanos se miraron entre ellos y luego al ser que estaba frente a ellos, no podían creer lo que estaban espectando ¡ERA EL MISMISIMO DIABLO! Y dueño del casino también.

"Hagan un último tiro y tendrán toda la ganancia de mi casino, pero si pierden ¡SUS ALMAS SERÁN MIAS! ¿Trato?" Los hermanos tazas se miraron una vez más, Mugman parecía asustado, pero Cuphead de manera confiada sonrió y asintió.

"¡CUPHEAD NO!" Gritó Mugman asustado y temblando sabiendo de las consecuencias.

Espectaste todo lo que sucedía, no podías creer lo lejos que pudieron llegar los hermanos taza, en eso escuchaste una ligera risa del hombre de tu costado sabiendo lo que pasaría después. 

"¡OJOS DE SERPIENTE!" Grita el dueño del casino riendo y golpeando el suelo con sus pies.

Los hermanos estaban llorando y suplicando mientras tú... pensaste...

[POV S/n]

Ellos me ayudaron, si no fuera por eso, no estaría aquí, y no he podido darle las gracias... ¡y no puedo permitir que se lleven sus almas! Tengo que hacer algo... ¡TENGO QUE HACERLO!

Interrumpiste.

Corriste hacia los dos hermanos poniendote enfrente de ellos, estabas cara a cara con el dueño del casino, por alguna razón tenías ese sentimiento de miedo... Pero a la vez seguridad.

-¡No puedes llevarte sus almas! ¡Son solo niños! Gritaste, un silencio corrió por todo el casino.

El diablo te contempló de pies a cabeza, empezó a reir a carcajadas cayendo al suelo, aún riendo, claro.

"¡JAJAJAJAJAJA! ¡OYE DICE, MIRA A QUIEN TENEMOS AQUÍ!" Ríe llamando a un tal... ¿Dice? Pensaste, así que el tipo que me estaba observando... ese es su nombre...

"¿Una chica?" Responde éste.

"¡YA SÉ QUE ES UNA CHICA, IMBÉCIL! ¿No te parece familiar?" Acerca al tipo con cabeza de dado a él y éste te mira algo confundido.

"N-No entiendo a que se refiere Señor..." Te mira más confundido. Tú también lo estabas.

El diablo gruñe molesto "¡NO PUEDES SER MAS IDIOTA" Apartándolo de él. A continuación éste se te acerca dando una gran sonrisa.

"¡En fin! ¿Dónde me quedé? ¡AH SI! Sus almas..." Replica mirando fijamente a los hermanos.

-¡N-No se los lleve! ¡Debe haber algo que puedan hacer a cambio...! Dices mientras los niños se quedan quietos mirando al suelo asustados.