Han pasado algunos años desde esa terrible revelación.
Marco, mi Marco no era real.
Después de algunas terapias por fin lo he comprendido. Es difícil asumir que en un inicio vivía para morir y estar con él pero, las personas que te quieren insisten en que tienes que vivir solo para ti, sin anhelar la muerte y sin anhelar estar con otra persona.
¿Nada fue real? Ni mis sueños, ni las personas maravillosas que conocí pero no en vida, sino en muerte y no la mía. Él, ella que me hizo cuidar mi alimentación, el hombre árabe, el hombre de la mirada penetrante, Marco...
No quiero olvidar.
La medicación hace que olvide.
Mi mamá, mi mamá aún me quiere, mis hermanos están vivos, mis papás no se han separado.
Mi hermano, mi hermano, mi hermano.
Estoy tan confundida.
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Normalmente...
RandomAquí diré cosas que normalmente sueño, escucho, siento o veo. Puede contener más ficción que realidad
