"Mi casa es mejor que la tuya"

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¿Que era peor que la clase fumada de desarrollo humano? Sencillo, la clase de desarrollo humano con tu archienemigo.

Chanyeol se consideraba siempre como una persona amable y de buen corazón, pero todo cambió cuando entró en bachillerato y un niño más bajito que él lo superó en lo que Chanyeol consideraba su mejor habilidad. Desde entonces ambos iniciaron una guerra de quien es mejor.

Ahora bien, la maestra de Desarrollo Humano parecía que fumaba en cada clase. Cada palabra que salía de su boca era ridícula. Incluso se atrevía a asegurar cosas de sus alumnos que ni al caso, como la vez que Taeyeon no quiso unirse en una actividad y la profesora la hizo llorar frente a todo él salón, mientras repetía: "No quieres participar por qué no confías en tus compañeros, esto quiere decir que tus padres no te quisieron lo suficiente". Por supuesto que nadie aprobó el comportamiento de la profesora.

Ahora mismo deseaba morir. No había tenido un agradable día y esa clase no lo ponía de mejor humor, por supuesto que su profesora se ganó su odio cuando lo emparejó con Byun BaekHyun, para un proyecto. ¿Por que con él? Por qué sabe el odio que se tienen.

—Para la próxima semana, quiero que sus trabajos en mi escritorio. Con este proyecto aprenderán cosas uno del otro, así podrán sentir La Paz y amor desbordando en el interior de cada ser humano—decía la maestra mientras sus alumnos discretamente la odiaban o se burlaban.

—Lo único que desborda Chanyeol, es torpeza—. Dijo Baek sentado a su lado.

—Tu desbordas desesperación—. Dijo mirándolo.

—No estoy desesperado, orejón estúpido.

—Eres un cretino.

—¡Uy, que insultote!

—¿De nuevo ustedes?—interrumpió la maestra.—Dejen de comportarse como niños, ¡son casi adultos! ¿O prefieren que los espose?

—No. Nos comportaremos.—dijo Chanyeol. —Lo haremos.

BaekHyun rodó los ojos pero aceptó. Cuando la clase termino, todos comenzaron a irse menos ese par quien discutía por donde hacer la tarea.

—Ya dije que en mi casa—. Dijo Chanyeol.

—Si no te soporto a ti, menos sopórtate a tu familia.

—Eres un verdadero fastidio. Por eso nadie te quiere.

—¿Perdón? ¿Olvidas a quien se le declaran cada cinco minutos?

—Bueno yo no te quiero, tampoco mis amigos.

—¿Así? JongIn ayer me pidió una cita.

—Ese traidor....

—Iremos a mi casa.

—¡No! Mamá hará mi comida favorita y no me lo perderé por tu culpa.

—Que infantil—suspiró. —Bien, será en tu casa, pero pobre de ti que no me guste su comida.

—Créeme, la amaras.

(...)

Chanyeol observaba como BaekHyun devoraba el tercer plato servido por su madre, sonrió de lado al saber que ganó.

—¿Te tenían amarrado, querido?—preguntó su madre con tono suave.

—¡Su comida es deliciosa! —dijo BaekHyun con la cara embarrada, a Yeol le pareció tierno ese gesto y le ofreció una servilleta.

—¿En tu casa no cocinan? —preguntó algo tosco.

—No mucho, mamá solo hace cena, y papá y yo somos un verdadero asco en la cocina.

Drabbles ChanBaek y otras ShippsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora