Era el día, Jackson llevaria a Mark a conocer a sus padres "adoptivos", aunque Jackson practicamente se había crecido solo desde pequeño, él al salir del hogar de niños había conocido a una pareja muy adorable que siempre le dieron una mano, y le brindaron un hogar hasta que él pudo irse y empezar su nueva vida solo, era una de tantas cosas que él le había contado a Mark, los quería como si fuesen sus padres y siempre que los nombraba así se refería a ellos "sus padres", el menor estaba un poco nervioso, no iba a negar eso, pero ademas de estar nervioso se encontraba bastante emocionado.
Y en esos últimos días, por fin se había confirmado a si mismo, por fin lo había aceptado, que estaba enamorado completamente de Jackson, ya no había ni un poco de duda de eso en la mente del pequeño; y tenía pensado decírselo pronto.
Jackson pasó por él en su auto, le ayudó a acomodarse correctamente la corbata del traje que le había comprado semanas antes y luego partieron rumbo a la casa de los Wang, o eso creía Mark.
Claramente él no conocía el camino hacia la casa de la familia de Jackson, pero algo dentro de él le decía que algo andaba mal.
-P-Por qué te detienes aquí?- cuestionó el menor asustado apenas Jackson detuvo su auto frente al lugar de tribunales.
-Mark, escúcham-
-Dejame bajar.- le interrumpió firme. -Abre la maldita puerta Jackson.- elevó el tono de su voz, se sentía muy enojado en ese momento, puesto que el mayor le habia mentido sobre ir a la casa de sus padres.
-No es lo que piensas, Mark, dejame explicar-
-No es lo que pienso?- rió falsamente. -Me trajiste engañado a este lugar, eso es lo que pienso, y es lo que está pasando, dejame irme ahora mismo y prometo no molestarte nunca más.- insistió intentando abrir la puerta nuevamente pero fue en vano porque Jackson le puso seguro.
-Mark..- murmuró, pensando, buscando en su mente la manera de llevar eso adelante, no se esperaba para nada esa reacción del menor.
-Dejame bajar del maldito auto!- gritó el mejor, tenia miedo, de regresar a prisión por una injusticia, de volver a quedar en ridículo frente a esas personas, de que JinYoung vuelva a salirse con la suya. -Jackson quiero irme!- gritó de nuevo con un nudo en su garganta mientras seguía haciendo el tonto intento de abrir la puerta, estaba bastante desesperado y eso era algo que preocupaba a Jackson.
-Mark!- gritó Jackson, logrando que el menor se sobresalte y le preste un poco de atención.
-Quiero irme, abre la puerta- insistió. -Por favor.- murmuró con un leve hilo de voz mientras dejaba que unas cobardes lágrimas cayeran de sus ojos, se sentia impotente y asustado. -No sabes...- pausó cerrando sus ojos para luego continuar. -No sabes en infierno que es eso.- limpió sus ojos. -Por favor dejame ir, no quiero estar aquí, no quiero....- pequeñas lágrimas comenzaron a caer de nuevo. -Por favor Jackson...solo...- lo miro a los ojos, y ver esa expresión tan dolida de Mark hizo que el corazón de Jackson se estrujara. -solo abre la puerta y...prometo que no tendras que verme jamas...por favor..- insistió.
Por un momento, Jackson pensó en abrir la puerta y dejarlo irse, pero luego recordó la razón por la que estaban ahí.
-Escuchame..- habló compresivo. -Sé que te asusta...pero todo va a salir bien, okay? confía, confía en mi.- tomó el rostro de Mark entre sus manos. -Confia en mi, y si las cosas salen mal y luego me odias, esta bien, pero esto va a salir bien, creeme..- habló.
-No estás solo Markie.- afirmó abrazándolo.
-¿Por qué me mentiste?- cuestionó el menor. -Yo no quiero estar aquí, queria conocer a tus padres, solo quería eso.- murmuró en en pecho del contrario.
ESTÁS LEYENDO
you; markson
FanficMark llegó para cambiar la vida de Jackson. Jackson llegó para cambiar la vida de Mark. Aquella primer sonrisa, el primer cosquilleo, la primer lágrima, la primera risa..¿Qué es realmente el amor? No es fácil de lidiar con esa cosa ¿verdad? Un brote...