CONEXIÓN

EL BANQUETE

Ese hombre  pelinegro nunca había tenido pareja y sin embargo ahora miraba con amor a Malfoy ¿Por qué? ¿Qué tenía Malfoy? ¿Qué veía en ese odioso rubio? Quizás lo hechizó o uso Amortentia, una poción de amor

No sería capaz ¿cierto?, Ese maldito era capaz de eso y más con tal de lograr lo que quiere

- ¿y qué pasa si le digo que su majestad está embrujado? -  murmuro Harry hacia la humilde señora

- digo que no importa, ya que mi hijo me contó lo que sucedió en la guerra -  señaló al rubio -  mi hijo está vivo gracias a él, eso nunca podré terminar de agradecerle; además si su majestad es feliz, aunque sea con hechizos, está bien -  completa muy feliz la mujer 

Harry sólo pudo pensar, qué esos tipos estaban dementes ¿cómo podían aceptar algo tan horrible, de esa manera tan simple? era inadmisible, inaceptable

- ¿Y tu niño cómo te llamas? - preguntó la anciana curiosa por el jovencito

-  su majestad dijo nada de preguntas - advirtió otro señor, que celebraba en la misma mesa

-  lo siento será mejor que no
respondas -  irrumpió la señora con seriedad

la pregunta y la respuesta del menor podían esperar

- ¿Por qué? -  interrumpió Harry indignado

-  el prometido de su majestad ordenó no preguntar acerca ¿de quién es usted?, sinceramente es intrigante sin embargo sus razones tendrá, así como tampoco podemos responder mucho acerca de este mundo.... lo siento - se disculpó la señora con una sonrisa amable

-  para que no esté perdido, le daré algunas instrucciones básicas - propone el hombre que antes hablo

-  ni siquiera puedo decir mi nombre -   gruñó molestó

Cómo odiaba a Malfoy, ese desgraciado

- le pondré uno, cosa que con ese, sí podrá presentarse tranquilamente - comenta la anciana, entusiasmada con la idea   -  no se lo tome a mal,  aquí todos queremos a su majestad,  él es el emperador no porque lo sea, sino porque se lo ha ganado y todo el pueblo confía en él ciegamente, se ha ganado ese lugar a través de los años  -  comenta Viendo

desde la llegada de ese niño, el emperador,  no ha dejado de sonreír

- ¿qué te parece Surar?  un nombre sencillo - propone la nieta de la anciana,  que estaba al tanto de la conversación

-  Si - acepto Harry de mala gana -  gracias señora, sin embargo no hace falta que me diga algo más.... La metere en problemas  -  sonrío amable

Si, Draco había ordenado aquello y él era el prometido del emperador, ¿A saber lo que iba a hacer?

-  si, es así a comer - dice la señora cuando escucha el estómago del menor gruñir

Harry estaba de hambre, ya que en esos días no había comido adecuadamente, no, porque no hubiera comida, sino precaucion

así que viendo, lo que le señora amable le esta ofreciendo, lo toma sin pensar, esa comida era sabrosa, tenía un sabor distinto, sin embargo sabroso; giro de nuevo hacia la mesa principal de los gobernantes

Dragón comia como nunca antes lohubiera imaginado, el rubio comía sin Morales, comía con la mano tranquilamente junto al peliblanco

Se atoró con lo que estaba comiendo, ver el rostro, no era malo y de paso lo que más le sorprendió fue qué le daba de comer al Azabache y éste a su vez igual y el hombre de al lado gruñía con molestia, nada de aquello parecía real