Mi Corazón [ Kaisoo ]

Capítulo 2

Pov JongIn.

Baekhyun Espinosa era conocidísimo en el barrio, con ese nombre tan angelical  y su linda apariencia, pequeña estatura (tierna para algunos), piel blanca, casi pálida, cabello castaño, labios pequeños y rosados, y ojos marrones claro. Pero no sólo por eso sé le conoce, sino por su carácter del demonio que atemorizaban a todos. El niño puede pasar de feliz a molesto en solo un parpadeo y pobre del desgraciado que haya ocasionado tal desastre.

Al ser el consentido de la casa, el único doncel, el último de los Espinosa, el 'reycito de mi corazón' como le decía La Enredadera  (su mamá) o hasta  'mi chiquito, reycito y preciosito', sus caprichos podian pasar desde  'Quiero un caramelo'  hasta 'Quiero que me regalen una cebra por mi cumpleaños'.

Precisamente, cuando años atrás cumplió siete y pidió tan extraño animal como regalo, el señor Espinosa se vio en problemas.

Flashback.

En ese momento el señor Espinosa intentó negociar con un circo que en ese momento pasaba por la ciudad, pero no tuvo éxito. Ofreció una suma de dinero extraordinaria al zoológico para que le vendieran una cebra, pero la respuesta fue negativa.

Baekhyun había amenazado con berrinche monumental, fiebre convulsiva y huida intempestiva del hogar, si no se cumplía rigurosamente con su petición. Los tenía a todos vuelta de cabeza.

Las hermanas buscaban en internet cualquier cebra en venta y también colocaban carteles en los postes de toda la ciudad con un mensaje clarísimo: compro cebra, pago lo que me pidan. Interesados comunicarse al 244 5669.

La Enredadera rezaba y ofrecía flores a todos los santos para que le cumplieran el milagro.

Pese a todos los esfuerzos la cebra no aparecía.

Todo el barrio estaba en la expectativa de lo que ocurriría el día del cumpleaños de Baekhyun. El barrio en su mayoría era aburrido y los berrinches del doncel mimado siempre eran la novedad y el mejor entretenimiento.

En aquel entonces yo hacia la cuenta regresiva de los días que faltaban para saber en que terminarían este dilema.

Esa misma noche, recibí la llamada urgente de  Kyungsoo.

Con el palo de una escoba golpeó el cristal de la ventana de mi cuarto que quedaba justo en frente de la suya, tenía la pijama de las Tortugas Ninja, se veía super lindo y tierno con el cabello desordenado, yo también llevaba una igual, con la diferencia de que más grande, así de admiradores éramos que hasta la pijama la teníamos de ellos.

"Baja , tengo una misión megaimportantísima para ti". Dijo en un susurro. Se veía emocionado.

"¡Pero son las doce de la noche!". Dije en un susurro cansado y alto. Ya era tarde y él debería estar descansando. ¡Este doncel estaba loco!.

"Ya se. Pero te digo claramente que es megaimportantísima y nos puede cambiar la vida. Vamos cuando te he mentido?". Me miró a los ojos, y maldita sea si podía negarle algo a ése doncel.

Bajé por la tubería de agua, apoyando mis pies en las rejas de las ventanas para encontrarme con él abajo.

"¿Tienes dinero?". Me preguntó sin rodeos. Sus ojos se encontraban brillantes y eso no me daba buena espina.

"¿Para que?". Pregunté alzando una ceja. Se veía demasiado emocionado y siempre se le ocurrían cosas locas cuando eso pasaba. Daba un poco de miedo.