Acuerdate de mí (Christopher Vélez)

Capítulo 2

Tn, se quedó mirándolos con alegría y algo de asombro a la pequeña que venía con Richard, sabía que teníak que actualizarse mucho, porque los años no pasaban en vano y eso ya se veía.

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-Bueno mi amor- dijo su madre con una sonrisa- Bienvenida de nuevo a casa- abrió la puerta sin quitar su sonrisa.

-Redecoraste la casa- dijo la chica mirando cada espacio de su casa.

Su madre había cambiado absolutamente todo,  sus cortinas,sus sofás, la alfombra, el color de la pared,  los adornos, su televisor, la cocina, todo.

-Pues sí- sonrió su madre- No quería que te despierte y encuentres todo esto con cosas del pasado- añadió observando también la casa.

-¿No te gusta?- preguntó Dakota mirándola fijamente.

-En realidad, me encanta- dijo Tn con una sonrisa- Y más aún porque estaré aquí con ustedes- las abrazó a ambas.

-Am...- suspiró Dakota- Sobre eso- se alejó un poquito.

-¿Qué pasa?- preguntó la chica sin comprender.

-Am... Bueno, esque mira, yo estoy muy agradecida con ustedes dos y sobretodo con usted señora- miró a la mamá de Tn- Por todo, pero creo que ya es hora de que yo.. Bueno, me valla,  no es porque no disfruto de esto, es más la pasé genial, pero esque creo que usted, bueno por lo que ya sabe no puede tener muchos sobresaltos con alguien más, la quiero, Y es por eso que lo hago- le sonrió a ambas.

-¿Qué problemas?- preguntó Tn sin comprender aún.

-Bueno lo que pasa esque...- la mamá de Tn no la dejó terminar.

-Lo que pasa es que ando muy cansada y eso- dijo con nerviosismo.

-Pero Dakota, no importa igual puedes quedarte- dijo rápidamente su amiga.

-Lo sé, pero enserio yo sé lo que te digo- dijo Dakota con tristeza- pero no se preocupen, yo vendré a verlas todos los días- dijo con una sonrisa algo fingida.

-Pero ¿dónde te quedarás?- preguntó la señora.

-Pues ya vi un departamento a unas cuadras de acá- señaló un lado de la calle.

-Bueno, si eso es lo que quieres- suspiró Tn bajando la cabeza- ¿puedo ir a mi habitación para poder descansar?- preguntó dirigiéndose a su mamá.

-Sí claro mi amor- dijo su madre mirándola con preocupación.

-Gracias- susurró, para luego subir hacia su habitación.

Lo que le dijo su amiga le hizo sentir algo muy fuerte dentro de ella, ya tenía suficiente con tener que lidiar con que se había perdido cinco años de su vida, con había un raro vacío dentro de ella, con ver el cambio de todos, con ver que su cuerpo de alguna manera había cambiado, con ver que Richard ya tenía una hija y que se perdió su boda con Yocelyn, que muchos de los chicos ya no estaban en ese lugar, con que tenía que arreglar un millón de cosas y ella le salió con que ¿se va a ir?

No, no era justo, ella merecía una tregua, aún tenía los miedos de una niña, aún tenía que madurar mentalmente y no la estaban apoyando con eso.

Sentía que las cosas estaban re mal, y no había manera de arreglar las cosas ahora.

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-¿Joel acaso estás loco?- preguntó Erick mirándolo mal.

-Es lo que el doctor dijo- se defendió- y no podemos desobeder, es por su bien- dijo malhumorado.