V: Recuérdame

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Kid tomó su vieja guitarra acústica, y tocó como hace muchos años no lo hacía.

A Killer se le hizo extraño verlo ahí en casa y a esa hora.

— Diablos estás aquí y no allá... ¿Estas bien amigo?

— Terminamos, me rendí.

— Tú nunca te riendes Kid.

— No, si fuéramos el uno para el otro estaría ahí... Estaba pensando la primera vez que fuimos al restaurante griego de la esquina, había un gran cartel que decía "Hola servimos sopa" y yo no dejaba de decir todos los obstáculos que el dueño debió pasar para cumplir su sueño de servir esa sopa, y cuando terminé, no dijo nada por unos minutos, y casi, en voz baja como si susurrara, "Te amo" y ahí se quedó, era la primera vez que lo decía, eso fue dos semanas luego de conocernos, tardó dos semanas en enamorarse de mi antes. — Limpiando una lágrima que salió de su ojo se levantó del suelo. — Él no me ama.

Esa noche Kid se dispuso a limpiar el estudio de Law, sacando cada cosa que había en éste. Las metió en cajas y se las mandó al ojigris, aún no tenía el valor de verlo todavía.

En los botes de basura había un gato que antes Law solía alimentar, siendo reprimido por Kid quien le decía que sólo iba a hacer que se encariñara. Al verlo Kid lo tomó en brazos y lo llevó adentro.



















Law estaba en mercado con su hermana, al alzar la mirada creyó ver a alguien.

— Hola Hancock… sé que han pasado mucho.

Fue algo obvio que la chica trataba de huirle a Law; se le veía nerviosa y titubeante. — Si, ha pasado mucho, oye, sé que han pasado años, pero...

— Sí hace años que me fui.

— ¿Sabes? Nunca pude, disculparme, estaba pasando por un momento difícil, era un momento muy extraño, pero, tu padre… lo terminó bien y tu madre lo confronto, siempre quise que lo supieras, no quiero abrir viejas heridas, pero, en verdad quería que supieras que lo siento.

— De veras me alegro que te disculpes.

— Siempre fuiste un buen amigo, ojalá pudiera haberte devuelto el favor.

Lamy llegó en el momento que Hancock se iba, la mirada de desconcierto de Law le decía todo.

— Law… quería decirtelo...

— ¿Tú lo sabías? ¿Lo supiste todo el tiempo?

— Law…

— ¡No me hables!

— ¡Law espera!

Llegando a casa, miro a su madre en el jardín de enfrente, arreglando las flores, el ojigris bajó del auto, azotando la puerta del conductor.

— Hola ¿Dónde estuviste todo el día?

— Me encontré con Hancock en la tienda, por eso me fui ¿No? ¡Porque me enteré! mamá, todavía no sé quién soy, y resulta ¿Que me estas mintiendo? ¿Y usas mi accidente para rescribir el pasado?

— Law… no podía soportar el dolor de perderte de nuevo.

— ¿Tienes idea de lo traicionado que me siento ahora?

— Perdón Law pero ahora somos más felices que hace muchos años, al fin volviste a casa.

— ¡Pero bajo sus términos! ¡Como siempre!

Vows Of LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora