-Hola Lucy- salude a la madre de Ash mientras me abría la puerta
-Hola pequeña-me regalo una sonrisa hermosa- ¿Qué haces aquí?-arqueo una ceja
-Vine a ver a…Ashton-dije algo sonrojada
-Pensé que había salido contigo-frunció el cejo- estoy segura de haberte visto-pensó- aunque… tenía el cabello más claro.
-Lenna-susurre.
-¿Qué dices linda?
-Oh nada Lucy, bueno fue un placer haberte visto, espero que nos veamos pronto-bese su mejilla y abandone la entrada de la casa.
Comencé a caminar hundida en mi mente ¿Qué haría Lenna con Ashton? ¿Qué es todo esto? ¿Por qué Ashton cada vez que tiene la oportunidad me pide disculpas? No, no, no me voy a perder en la oscuridad de mi mente e inseguridades seguro que todo esto tiene explicación, seguro que es un proyecto ¿Proyecto? Si las clases terminaron. Volví a hacer lo mismo de siempre, solo que con lluvia.
Camine rumbo a la parada de auto bus y suspire, cuando este llego sonreí y me subí, pague el boleto y camine al asiento de siempre, comencé a observar a todos, como había hecho cada día de mi vida cuando estaba en la preparatoria, sonría como tonta ¿Cuándo cambie tanto? ¿Cuándo me volví feliz? ¿Cómo cambio todo? Aquel abogado y las dos enfermeras se subieron y los tres fijaron la vista en mí.
-Es lindo verte de nuevo-dijo la enfermera
-Y que estés tan contenta-dijo su compañera y yo me sonroje.
-Hace mucho no te vemos-agrego el abogado y se sentaron todos cerca de mí, yo estaba desorientada
-No eres la única capaz de observar, no te escondas, eres preciosa-dijo una de las enfermeras-mi nombre es Marta y ella es Noemí-dijo y les sonreí
-Yo me llamo Josh-me sonrió-¿Y tú?
-Yo soy… Sky-susurre avergonzada, todo este tiempo vieron que los observaba.
-No te sonrojes, es lindo saber que alguien te mira y sobre todo que intenta comprenderte- hablo Marta.
-Sky es un hermoso nombre-dijo sonriéndome Noemí- ¿Cuál es tu apellido belleza?
-Clifford-susurre- Soy Sky Clifford-todos me miraron sorprendidos- no me miren así, mi vida era o lo es, no lo sé, miserable.
-Es difícil-susurro Marta
-Todos tenemos vidas miserables-dijo Josh
-Pero podemos continuar, mi infancia no fue la mejor-hablo Noemí.
-No existe la infancia perfecta, créeme-dijo Marta
-Ni los padres perfectos-agrego Josh.
-Sé que no, pero… es difícil cuando vives a la sombra de tu gemela-agregue, en cualquier comento
-Entonces no lo hagas, se simplemente…
-Sky-dijeron los tres a la vez
-Me alegro de haberlos conocido-dije luego de un rato- Gracias-sonreí- Espero pronto poder tomar un café con ustedes-ellos asintieron- esta es mi parada…-dije
-Lo sabemos-sonrieron- fue un placer pequeña-dijo Marta
-Lo mismo digo, gracias, alegraron mi día-salude con un abraso a todos y baje rápidamente comencé a sonreír, no esperaba que algo así me pasara y mucho menos en un transporte público, comencé a caminar rumbo a casa, quería… correr, raro en mi porque odio todo tipo de actividad y así lo hice, comencé a correr, pero rumbo a la playa, cuando llegue sonreí y comencé a gritar y saltar mientras todo lo que tenia guardado lo dejaba salir, lloré, grite, reí, todo junto, era raro y la gente pensaría que estaba loca, pero aun así no me importo, apague mi celular y lo deje a un lado y con la lluvia y con la brisa de aquel verano triste me metí al mar, no me importo mi ropa, ni mi maquillaje ni nada, me sentía libre, feliz, durante tres años alguien, me miraba, me sentí bien, siempre había querido ser invisible, PERO NO LO ERA y me alegraba, no me conocían por “la perra anoréxica”, “La hermana de Helenna”, para ellos solo era la chica triste rubia encargada de observar a los demás y ellos… encargados de notarme, comencé a nadar y sentí como mi zapatilla quería escapar de mi pie, entre risas salí y las ate, tome mi celular y comencé a correr por la playa hasta que llegara a unas cuadras de casa, la vida me estaba sonriendo y yo me estaba sintiendo feliz, cuando estaba por salir de la playa choque contra Luke y Clara, quienes habían salido juntos.
-Por mi dios que te paso-dijo clara mirándome y yo solo sonreí tontamente y la abrase.
-Estoy feliz-dije y abrase a Luke- ahora basta de abrazos y sean felices-grite mientras seguía corriendo, ellos me miraron raro, pero no me importo seguí corriendo, amaba sentirme tan… completa, tan llena, no me sentía vacía, por una vez en mi vida me sentía bien, llena y a gusto conmigo misma- Maldita sea que soy feliz-grite mientras abría la puerta, escuche gritos de la parte de arriba y camine, el cuarto de Lenna, me acerqué sigilosamente a escuchar.
