Capítulo 9: Noh el Castigador (Parte 2)

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Historia de: @MissFujoshi0202

Traducido por: JCM

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PHUN


"No voy a decir nada más Apple. Lo siento, pero ¡MI novio y yo tenemos que irnos!"


Noh me tira esta vez entrelazando nuestros dedos. Sonrío mientras lo sigo. No me importa si me arrastra con él al infierno o donde sea que esté. Mientras él esté a mi lado, seré feliz.


Noh llamó a un taxi y me empuja hacia adentro con fuerza hacia al asiento trasero.


Una vez dentro del taxi, Noh se quita la máscara. Quiero hablar con él, pero él sigue callado. No me atrevo a alimentar la ira de Noh. Sé que sólo terminaremos discutiendo. El taxi se detiene en la casa de Noh, y después de pagarle al chofer, me saca con él.


"Uhm, Noh ... yo ..."


"Sigues diciéndome que nadie me puede tocar ni besar. Pero dejas que alguien te lo haga a ti. Déjame decirte esto Phun. Tu cuerpo, tu corazón y tu alma son todos míos. Además, mis padres no están en casa esta noche, así que prepárate."


Probablemente parpadeé diez veces por segundo cuando dijo la palabra "preparate." Mientras lo proceso en mi mente, me ruborizo ​totalmente después de descifrar la agenda oculta en esa palabra. ¿De verdad Noh?


Abre la puerta y la empuja. No se olvida de ponerle llave esta vez mientras empuja mi espalda contra la puerta, capturando mis labios con los suyos y comienza a besarme brutalmente.


Noh no está bromeando esta vez, ni puedo sentir ninguna vergüenza emitir de él. Esta es la primera vez que Noh se vuelve agresivo conmigo. Intento dominar el beso, pero él me supera. Deslizo mis brazos alrededor de su cuello rindiéndome.


Noh arrastró nuestros cuerpos conectados a dondequiera que fuera, hasta que mis rodillas comienzan a sentirse temblorosas. Me tropiezo y caigo en la escalera. Afortunadamente, Noh me apoyó la espalda, el sólo me mira por un segundo y luego volvemos a hacerlo. Nuestro insaciable deseo del uno por el otro.


Estoy sentado en la escalera que va a la habitación de Noh cuando él comienza a desnudarme.


Noh está frotando mi pezón suavemente con la punta de su dedo índice. Luego se quita los tirantes que ahora cuelgan de su costado y sigue besándome implacablemente. Puedo sentir cuán hinchados están mis labios ahora pero todavía no se detiene. Jadeo entre nuestros besos para que entre un poco de aire. Noh sigue tirando mi lengua más profundamente en la suya.


Cuando pienso que ya necesita un poco de aire me sorprende. El comienza a lamer mis mejillas, mis lóbulos de la oreja, y de nuevo a mis labios. Todo mi cuerpo se estremece cuando el placer se apodera de todo mi ser.


Lo saludo con mi lengua húmeda y se balancean como un baile de los viejos tiempos. Él se aparta un poco y se desplaza hacia mis pezones ahora hinchados y duros. Él comienza a lamer con un movimiento circular chupando con fuerza hasta que se vuelven rojo rosado. Gimo su nombre y sigo diciéndole que haga más.


Mi espalda ahora está empezando a doler por estar apoyándome en la escalera. Cuando Noh se da cuenta, me levanta para llevarme a su habitación.


Miro hacia abajo, y la tela que cubre su frente ya está empapada de pre-cum. Cuando voy a tocarlo, él me empuja sobre su cama rebotando sobre mi espalda. ¡Me empujó fuerte! Cuando estaba a punto de levantarme y quejarme, él toma mis dos muñecas por encima de mi cabeza y las ata con un nudo.


"Noh, ¿qué crees que estás haciendo?" Le pregunto nerviosamente.


"¡Estoy enseñándole una lección a mi novio por dejar que alguien lo bese dos veces y por ponerme celoso!"


Intento mover mis piernas, pero él se sienta justo en mi miembro abultado y me hace arquear la espalda. ¡Dios! ¿Está tratando de matarme?


"Oh, apuesto a que te gusta Phun. Puedo hacerte retorcerse con placer aún más."


"¡Deja de mover tu maldito culo, Noh!"


"Noh por favor, yo ..."


Noh me calla y comienza a morderme los labios y lame mi sangre de ellos. Se levanta de encima de mí y empiezo a extrañar la fricción que estaba haciendo anteriormente. Arqueo la cintura para encontrarme con la suya, pero él me empuja hacia abajo.


¡Mierda!

El Cuento de los Celos de NohDonde viven las historias. Descúbrelo ahora