위험한 → SEYEOL [Cancelada]

VI

Narrador; 叙述者

Entró por la puerta principal de color blanca la cuál dejaba ver el salón moderno , esperando poder ver a sus padres sentados en esos bellos sofás blancos esperándolo para poder conversar sobre el nuevo inquilino que se quedaría en su gran y lujoso hogar un largo tiempo, le frustro bastante no encontrar a sus padres, ya que se le haría más difícil buscarlos por esa enorme casa con tantas habitaciones que casualmente no estaban vacía, si no que mantenían algún fetiche suyo o de sus padres - como un salón de videojuegos o un armario muy extenso ­­­-.

Comenzó a buscar en las habitaciones de primer piso, en el bar abierto, cocina, inclusive en el jardín trasero, pero no, no estaban en ningún metro cuadrado del primer piso, por lo que resignado y ya harto, se dirigió a las escaleras que conducían a una especie de habitación donde en medio, se encontraba un hermoso piano de mármol, hecho exclusivamente para él, para que se especializara en la composición , pero claramente no le interesaba aprender aquello, ni un simple acorde, por lo que el piano solo estaba de decoración. Iba a dirigirse directamente al estudio de trabajo de su padre - ya que pasaba mucho tiempo en el trabajando- pero, un sonido llamo su atención, parecía algo cayéndose en el duro suelo en una de las habitaciones que se encontraba vacía, por lo que sin titubear se acercó a la puerta donde venía el ruido, su mano toco el pomo gris de la puerta y la giro logrando abrirla pensando que su padre Yixing estaba dentro arreglando o decorando esa inútil habitación, lo que menos esperaba era encontrarse cara a cara con el chico que llevaba acosando más de dos meses. Su respiración se heló, ¿Cómo podría estar ese chico allí? Parado frente a él con su teléfono en mano que al parecer fue aquello que azoto en el piso, su respiración volvía a la normalidad pero volviéndose cada vez más agitada, el calor comenzaba a extenderse por todo su cuerpo quemandolo , sus manos sudaban, sus músculos comenzaban a tensarse, sin ocultar la excitación que estaba experimentando de tan solo verlo frente a él, paso sus blancos dientes por su labio inferior jalando de este con una mínima fuerza dejando a un Chanyeol muy confundido por su acción, Sehun no podía evitar sentirse de aquel modo allí estaba él y sus rizos alborotados de un brillante marrón que con gusto enredaba sus dedos y jalaba para escuchar sus gritos de súplica, sus hermosas orejas que terminaban en punta que mordería hasta dejarlas completamente rojas, ojos tan oscuros que hacían perderse en ellos y delirar de solo ver sus largas pestañas bailar por cada parpadeo que daba, quería verlos perdidos por cada embestida que diera, sus labios rosados que seguramente le harían entrar en éxtasis y lograría volverlo adicto, piel tan pálida perfecta para plasmar sus labios, dedos y marcar cada parte de ella, no podía evitar ocultar sus ganas de tocarlo, estamparle contra el piso o pared, hacerlo suyo, escuchar como gemía y retorcía bajo suyo, crearles tanto orgasmos al mismo tiempo que por obviedad le costaría hasta levantarse al día siguiente.

Por otro lado, Chanyeol miraba al contrario con expresión de confusión, ya que, Sehun se mantenía quieto en su lugar mirándole con demasiada atención, como queriendo guardar cada detalle, cada facción de su físico en su mente, claro que esa mirada demostraba mucho más. Sehun dio un paso hacia adelante teniendo la intención de acercarse al chico que era su obsesión, su éxtasis y su clara perdición, cada paso que daba, Chanyeol los retrocedía hasta que el gran ventanal se interpuso en su huida dándole más ventaja a el hijo de los Kim acercarse, Sehun esperaba poder tocarlo, sentir como era la piel de ese chico, elevo su mano estando a unos pocos centímetros del rostro contrario, y cuando justamente sus dedos iban a rozar la suave mejilla de Chanyeol, desde fuera de la habitación, se escuchó la voz de unos de los empleados, MinSeok. — Amo Sehun, la cena ya está lista y servida. — con ello logro que la atención de Hun se desviara a la puerta y dejara a medio camino su acción, eso ayudo a Chanyeol, quien posiciono sus manos en el pecho de este y empujo para así hacer espacio y huir rápidamente por allí, sintiendo una gran incomodidad siguió al empleado del chico que desconocía se persona hacia el comedor, ya que por lógica aún no memorizaba donde quedaban ciertas habitaciones, Yeol no conocía a ese chico, jamás lo había visto en su vida y muchos menos le sonaba su nombre, lo que Chanyeol no sabía, es que ese desconocido, memorizo cada uno de sus datos personales, también los lugares que más frecuentaba, cada familiar que estuviera a su alrededor y hasta memorizo cada amistad cercana.

Ese chico sabia más de Chanyeol, que el mismo Yeol.