"Duda"

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Las palabras fluían desde su mente a través de su boli y se plasmaban en el papel en forma de poema.

No encontraba otra manera mejor de expresarse a sí mismo. Era cierto que con sus amigos podía decir exactamente lo que pensaba sin ninguna consecuencia más que alguna risa o alguna patada (que tampoco era su punto débil).

Dave se detuvo mientras pensaba qué podía ser lo siguiente que le quedaría bien a su poema.

"...Y aunque promesas no te puedo hacer,

Si es verdad que algo por mi puedes hacer..."

No lograba encontrar el verso perfecto.

Mucha gente se burlaría de él por ello. Que si cualquier cosa vale, que si no se coma tanto la cabeza... Habría gente que incluso le instaría a dejar de escribir esas "chorradas sin sentido" y le intentasen convencer de que hiciera otras cosas más "productivas" como practicar algún deporte.

Si que era verdad que Dave muchas veces adolecía de lo que comunmente se llamaba "vida social". La mayoría de veces que los chicos terminaban sus labores académicas, se iban a realizar un plan de los de Austin, los cuales no eran del agrado de Dave.

Podría ser que Dave se tomara la vida demasiado en serio? No, tan solo estaba tratando de hacer lo correcto, para asegurarse un buen futuro en la vida.

Y sin embargo, no estaba al 100% seguro de que ese futuro siquiera existiese.

Cuál era el futuro que él buscaba? Quería ser investigador? Periodista? Artista?

Podría llegar a conseguirlo? Realmente sería feliz siendo de esa manera?

Estos pensamientos le reconcomían la cabeza y, para cuando se dio cuenta, eran las 21:37. Dentro de poco darían el toque de queda y nadie podría salir de sus habitaciones. Se alarmó, ya que Chris no había vuelto todavía.

Se alarmó.

Desde cuándo le preocupaba lo que Chris hiciera? Había demostrado en varias ocasiones que podía desenvolverse solo en muchas situaciones. Además estaba con los chicos. Qué problema habría?

Sin embargo, la respuesta a esa pregunta reposaba en su cabeza.

"No está aquí conmigo, ese es el problema."

Más confuso que nunca, Dave trató de tomar una decisión. Debería salir a buscar a los chicos? Sería mejor esperar a que Chris volviera por su propio pie?

Sin dudarlo, se levantó de su silla y se cambió de ropa. Vaqueros rasgados. Botas de cuero. Camiseta blanca y sudadera granate. Algo decente para salir aunque solo fuera a estar dentro del recinto.

Abrió la puerta de su habitación y miró quién había por el pasillo. Como de costumbre, nadie salvo la limpiadora, que en ese momento giraba la esquina del fondo del pasillo para dirigirse a otra ala.

A estas horas todo el mundo debería estar dentro de sus habitaciones. Solo los chicos aún no habían llegado.

Tras pensar por un momento a dónde podrían haber ido, Dave se encaminó a la cafetería, que era una especie de "nexo". Desde allí salían los 4 pasillos principales que conducían a casi todo el recinto. Una vez allí, Dave miró el reloj. Las 21:42. Debía darse prisa si quería encontrarles antes de estar en el horario en el que fuese totalmente aceptable aplicarle un castigo ejemplar.

Decidió salir al jardín que daba al acantilado. Era uno de los sitios favoritos de Chris, porque podía estar solo.

Otra vez Chris. Fuera lo que fuese lo aue estuviera pensando, siempre lo relacionaba con él.

Siguió caminando hacia la cancela, abierta como siempre, cuando escuchó una voz detrás de él:

-Vaya, vaya, vaya... Qué tenemos aquí? Si este no es Mr. Madurito, no se quién puede ser.

Risas.

A Dave se le dibujó una mueca de rabia en la cara. Esa voz era la de Jonas Coleman. El tío que tenía por hobby hostiar a todo el que se le cruzara en el camino y a quien no, también. Y cómo no, acompañado por sus dos lameculos Corey Sheppard y Bastian Solomon.

Dave se volvió, tratando de mostrar indiferencia del comentario. Soltó una única palabra.

-Qué.

Jonas dibujó una sonrisa miemtras se sacaba el cigarrillo de la boca.

-Disculpe, Mr. Madurito, pero nos gustaría saber a qué se debe su visita por estos lares.

Dave ni se inmutó y volvió a hablar:

-Hablas como un gilipollas.

La sonrisa de Jonas se esfumó de la cara, mientras se acercaba a Dave poco a poco.

-No recuerdo haberte dado permiso para hablarme así, Stephens.

Dave seguía impasible, aunque por dentro no estaba tan seguro.

-No necesito el permiso de nadie para calificarlos como realmente se merecen. Es un país libre, no?

-Cogedle.

Antes de que Dave pudiera hacer nada, Corey y Bastian ya lo tenían agarrado. En ese momento lamentó haber dejado de hacer gimnasia.

Jonas lo tenía a su merced. Esto era lo que más le jodía.

-Ya que estamos en un país libre, me voy a tomar la libertad de darte una lección para que aprendas cómo tratar a los mayores.

Dave hervía de rabia.

-Esta por aparecer aquí.

El gancho le dió directamente en el mentón, haciéndole morderse la lengua y brotándole de esta un poco de sangre. Dave masculló algo como "hijo de puta".

-Esta por vacilón y por insultar.

Esta vez el golpe fue directo a la nariz. Dave pudo oír el crujido que hacía su propia nariz al romperse, a la vez que su grito de dolor ahogado. Podía sentir como la sangre le brotaba de sus fosas nasales.

-Y esta por la zorra de tu madre.

Esta vez no fue un puñetazo, sino un golpe de un bate lo que sintió sobre su cabeza, dejándolo completamente inconsciente.

Una de las últimas cosas que vio fue como Jonas, Corey y Bastian se alejaban riéndose de él y celebrando su "hazaña".

Después de eso, nada.

Más que hermanos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora