Sofía.

33.1K 244 142
                                    

Sara estaba horriblemente nerviosa, estaba afuera de aquella enorme escuela, sus piernas temblaban

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Sara estaba horriblemente nerviosa, estaba afuera de aquella enorme escuela, sus piernas temblaban.
¿La recibirían bien?
Esperaba que sí, ya que su estancia en otros sitios no había sido la mejor...

Quería por fin sentir que encajaba en algún lugar, conocer a alguien que la viera con cariño, no quería volver a estar sola, aislada.

Puso un pie dentro de su salón de clases y sintió cómo un escalofrío recorrió su espalda. 
No quería llamar la atención estando de pie, así que se sentó en el primer lugar que vió.

Las clases empezaron con una presentación grupal, era su turno ¿Que debía decir? Ella no era interesante.

—M-me llamo Sara...—Dijo a penas esperando que nadie notara lo nerviosa que estaba. —Tengo 15 años.

—¿Qué sueles hacer en tu tiempo libre Sara? —Pronunció firmemente el profesor mirándola amablemente.

—Eh...Y-yo...Yo...—Sara no tenía idea de que decir, la mayoría del tiempo se encontraba sola, sin ánimo, ni siquiera podía hacer un dibujo bien, era inútil.

—Nada en especial, no soy buena en algo específicamente. No soy buena en nada. —Esta vez sus palabras sonaron más firmes, como si se estuviera reprochando a sí misma.

—Está bien, gracias Sara.

Sara se sentó rápidamente y notó el ardor en sus mejillas. Cómo todos la miraban.

Las clases pasaron rápido, por desgracia vió como ya algunos de su clase habían hecho amigos, ella por un lado no le había dirigido la palabra a nadie. Se memorizó un par de nombres, edades y rostros, pero era incapaz de dirigirse a alguno de ellos.

El salón estaba quedando vacío, Sara tomó su mochila y revisó bajo su pupitre, para no dejar nada allí.
Entonces fué cuando notó un pequeño pedazo de papel.

"Eres rara..."

Lo sé.

"Me gusta."

¿Qué?

Releyó la nota para ver si había algún nombre, la vió por el otro lado pero, nada.

Arrugó el papel y lo tiró a la basura, dejando en silencio el salón.

Al siguiente día, llegó un poco más temprano, de ese modo no llamaría la atención entrando tarde.

Aunque...El salón estaba vacío.

Creo que me pasé un poco...

Pasaron entre 2 a 3 minutos cuando una chica de cabello negro entró silenciosamente al salón.

Sara reconocía su rostro, ayer la vió, aunque...Por una extraña razón ella no se presentó.

¿Será muda?

Girls Love ; Relatos Lésbicos ♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora