Solo Somos Tu Y Yo (Jin & Zoe)

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La joven pareja acababa de entrar en la habitación del hotel que Jin había reservado especialmente para esa noche: su aniversario.

Tras una romántica cena, se dirigieron allí rápidamente, pues ambos sabían lo que vendría a continuación.

Nada más cerrar la puerta, se fundieron en un apasionado beso.

Sus lenguas se chocaron y entrelazaron y muy pronto empezó a subir la temperatura.

Zoe se separó de él. Bajó la cremallera del vestido que había comprado para esa ocasión tan especial, y lo dejó caer al suelo.

No llevaba sujetador y solo quedó cubierta por unas pequeñas braguitas.

Observó la expresión de Jin y sonrió. Le encantaba la cara de deseo que ponía siempre que se desnudaba ante él, por eso lo hacía a menudo.

Volvieron a acercarse y a besarse, ahora con más furia y fervor. Zoe agarró el trasero de Jin, le encantaba, se notaba que Jin era muy deportista, pues su culo era duro y bien marcado.

Zoe siempre presumía del culo de su chico ante sus amigas.

Jin agarró los pechos de Zoe. Otro chico hubiera pensado que eran unos pechos demasiado pequeños, pero a él le parecían perfectos.

Se agachó para poder saborearlos. Agarró el pecho izquierdo con su mano, chupó y mordisqueó el derecho. Zoe soltó un suspiro de placer. Luego cambió, y fue el pezón izquierdo el que se llevó los mordisquitos.

Ahora fue Jin el que se separó para sacarse la camisa.

Agarró a Zoe y delicadamente la tumbó en la cama.

Desde su boca, comenzó a besar cada centímetro de la piel de su novia, deteniéndose un rato más largo en las dos tetas.

Siguió bajando, hasta que se topó con esas pequeñas braguitas que ahora mismo tanto lo estorbaban.

Se las quitó, se acercó al sexo de Zoe y respiró, le encantaba el olor que desprendía cuando estaba cachonda, y en esos momentos lo estaba.

Jin cerró el espacio que había entre Zoe y su boca, y saboreó.

Lamió cada centímetro del sexo de ella mientras sus oídos disfrutaban de los gemidos de la chica.

Metió primero un dedo dentro, luego otro más. Mientras su lengua lamía y lamía el clítoris, sus dedos entraban y salían a placer.

Los gemidos de Zoe eran cada vez más altos y más seguidos.

Zoe: Me corro Jin, ¡me corro!

-Jin aumentó el ritmo de la cosa hasta que escuchó el grito de la llegada al climax de Zoe.

Se separó de ella, y saboreó los últimos flujos que quedaban en su boca.

Se separó de la cama para quitarse el pantalón y el bóxer.

Su pene estaba totalmente erecto, pues comérselo a Zoe le ponía tremendamente cachondo.

Se tumbó en la cama junto a su novia, ahora le tocaba disfrutar a él.

Zoe no le hizo esperar, se incorporó, ya recuperada de su orgasmo, y se metió el pene de Jin en su boca.

Ahora era él el que gemía y suspiraba placenteramente.

Zoe movió la cabeza arriba y abajo, cada vez más rápido.

Sin embargo, no tardó en sacarsela de la boca, pues no quería que Jin se corriera ahí.

Rápidamente, antes de que el chico pudiera protestar, se sentó a horcajadas sobre él, sujetó el pene, y despacio, fue bajando, hasta que se la metió entera en el sexo. Ambos suspiraron a la vez.

Era toda una gozada que Zoe hubiera empezado a tomar la pastilla anticonceptiva.

Antes Jin se ponía un condón, pero se notaba en la fricción, y lo que acababan de hacer, no lo habrían podido hacer tan rápido.

Jin se incorporó un poco, y empezó a chupar de nuevo sus tetas.

Mientras Zoe subía y bajaba lentamente, muy lentamente, tan lentamente que Jin se desesperó, agarró a Zoe de la cintura y dio la vuelta, quedando él encima de ella.

Dio embestidas rápidas y con furia, hasta que se le ocurrió algo mejor. Se separó de Zoe y susurró.

Jin: Ponte a cuatro patas.

Ella no se hizo esperar. Jin se situó de rodillas detrás de ella, y volvió a penetrarla.

A ambos les encantaba esa postura, era muy fácil y muy placentera.

Jin volvió a dar embestidas duras y muy rápidas, los gemidos de ambos resonaban por toda la habitación.

Jin ya estaba a punto de eyacular, pero aguantó hasta que notó como Zoe se contraía, eso significaba que iba a correrse enseguida.

Zoe: ¡Me corro otra vez Jin!

Jin dio las últimas embestidas y ambos gritaron de placer, corriéndose juntos. Salió despacio de ella, y se tumbaron en la cama, abrazados.

Zoe: Feliz aniversario, Jin.

Jin: Te quiero. -Respondió-

Y así, abrazados, se quedaron dormidos hasta que llegó el día y se dispusieron a hacer el amor de nuevo

Solo Somos Tu Y Yo  {+18}  (One Shots De BTS)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora