ONE-SHOT'S

FLOATING

⟣ɗᥱcurʏ⟢

➽Dime por qué he cambiado tan rápido…

—Me gustas, inclusive creo que te amo.

Así sin más Freddie confesaba sus sentimientos a John.

Un silencio se apoderó de la habitación donde se encontraban, el peli negro se puso nervioso, la sensación que nunca había sentido al declarar sus sentimientos.

—Entiendo si no quieres volver a verme, solo que… —Freddie rompió el silencio, pero fue interrumpido por los labios del castaño, lo besó.

Su primer beso, jamás lo olvidarán.

El recuerdo invadía la mente de John, cada vez que pasaba por su mente era aún más doloroso.

Cuando mis amigos están cerca de mi…

—Sabemos que es difícil, no imagino y mucho menos siento tu dolor, pero no puedes vivir así, a él no le gustaría—Roger hablaba.

John perdía la vida, ¿se puede vivir sin él ser amado?.

—Vamos Deaky, no puedes seguir así, van más de dos años…—hablo el rizado.

Sin reacción alguna.

—Les agradezco su interés, pero no quiero saber nada, esto no es vida. Nunca lo será sin él a mi lado—se atrevió a hablar.

El par solo lo miro, dos años habían pasado desde aquel día, John cada vez estaba peor.

—Y si lo intentas ¿por tus hijos?—preguntó el rubio.

—Es por ellos qué sigo respirando, porque vivo no me siento—suspiraba.

Cuando están compartiendo todas sus historias, mi sonrisa aparece sin vida…

Tres años pasaron, aún así la presión en el pecho no se a ido, o no la quiero dejar ir.

Los escucho, me llevan a fiestas, lugares llenos de personas que parecen vivir el mejor momento de sus vidas, tal y como me hacías sentir, estuviste a mi lado, llenabas mis días de alegría, amor, paz y no lo sabía.

De nuevo lágrimas salieron de mi rostro, las oculté de inmediato, voy al baño.

Sentado en la taza de baño, la más fría o eso dicen las personas, llorando tu ausencia, sufriendo tu dolor.

Los veo desde arriba…

El trance de nuevo quiero flotar, sentirme en el paraíso de las nubes, acariciar tu rostro, sentir tus labios sobre los míos, sentir la calidez que solo tu cuerpo me brindaba.

Lo hice, volví a drogarme en un baño público.

Vi mi cuerpo en el suelo del baño, sintiendo como todo el profundo dolor desaparece, bueno casi todo. El dolor y sufrimiento siguen ahí, los malditos no se van, por más cantidad de sustancia que use jamás se van.

Me encerré a mi mismo, me dejaron flotando ahí. Necesito tu amor…

—¡Roger date prisa!, no resistirá mucho—todo se oía como si estuviésemos en un cuarto con mucho eco.