Creepy Tales 1

4.

Al habia desaparecido hace dos días sin noticia alguna de su paradero, y a nadie le importó, todos le odiaban, excepto sus padres que a pesar de todo fueron los primeros en perder la esperanza de encontrarlo, sabian que nunca le habia gustado vivir con ellos y asumieron que al fin tomo la decision y que se largo de casa sin aviso alguno, aunque lo habia dejado todo en casa: Ropa, dinero, pertenencias; era obvio que queria iniciar una vida de cero.

4to Dia de la Novena de Navidad

Habia cosas nuevas en el pesebre de ese año, muñecos nuevos, musgo mas fresco y nuevas luces. Tambien la muñeca de su hermana vestida de la madre del niño Dios, esta vez Marcus había armado la recreacion del nacimiento de Dios y habia algo que le inquietaba la muñeca de Alice se movia casi imperceptiblemente de un lado a otro de tal modo que Marcus pensaba que se lo estaba imaginando, aunque si sabia que la muñeca silbaba pero no lo podía asegurar con toda certeza hoy se lo preguntaria a su hermana en secreto lejos de su padre no queria aumentar su "paranoia" hacia la muñeca.

Ella es nuestra madre-le habia dicho Alice varias horas despues cuando se encontraban hablando en su cuarto, y Marcus no le creia por nada, no queria creerle, algo tan macabro ni siquiera era imaginable-mi amigo Jason me la regalo, o más bien reparó, según el; después del incendio-prosiguió Alice intentando argumentarle algo a su hermano acerca de la nueva apariencia de su madre-parece que ella ahora fue transformada en un muñeco.
Marcus no podia creerle, su madre habia muerto, ellos habian enterrado su cadáver, o bueno lo que quedó de él(medio cuerpo, la otra mitad se quemó y ardió hasta que no era más que una masa tostada y sanguinolenta de musculos y tuétano), él lo recordaba bien todos lloraban menos Alice ella estaba feliz pero no por su muerte, eso era imposible. Marcus empezó a atar cabos, la aparencia de la muñeca, su conexión con Alice, su aparición, el dia en que se la dio, su ánimo; todo encajaba pero Marcus no podia creerle, era algo inexplicable por mas coincidencias que existiesen.
Mamá, hablale-le ordenó Alice a la muñeca justo despues de entregarsela a Marcus para que la sostuviera, la muñeca empezó a silvar y Marcus se desespero, su madre estaba viva, lo confirmó viéndole los ojos eran identicos a los de su madre, Marcus desesperado empezó a excavar en la piel de cera de la muñeca con todas sus fuerzas pero Alice le detuvo al instante-es inútil-le dijo miranfole a los ojos a Marcus con una mirada triste en los ojos mientras que las lágrimas empezaron a brotar desesperadas por salir de los ojos de Marcus-solo le haces daño lo he intentado sientos de veces y lo único que consigo es que grité y sangre-Marcus observó con mas detalles el lado rojo de la muñeca, no eran quemaduras eran arañazos que nunca sanarian.
Escuchame Alice-le dijo Marcus a Alice agarrandole por la nuca y acercando su cabeza a la  de ella-tenemos que contarle a nuestro padre y pedirle ayuda, el es oficial de policia de seguro nos podra ayudar.

La hora habia llegado, los tres se hallaban parados en la habitación de Alice frente a la muñeca, su padre observando la muñeca, escéptico, y los dos agarrados de las manos esperando que Jason dijera alguna palabra, el silencio de la habitación era pesado, su padre era muy escéptico acerca de lo que le habian contado sus hijos, aquel deberia de haber sido algun hombre disfrazado, de seguro sus hijos todavía no habian superado la muerte de su esposa y de seguro se lo demostraban de esta manera.
Lo noto esceptico señor Myrtles-le dijo Jason mientras jugaba con un ratón negro de madera que se encontraba en la estantería de peluches-parece que no cree en todo lo que le han contado sus adorables hijos.
Todo esto es un tazon bien grande de la mierda mas espesa que he visto-le respondió El señor Myrtles al hombre que se hallaba frente a el.
No me voy a disculpar con ustedes chicos-continuó mirándoles a ambos con una mirada acusatoria-miren se que aun no superan l7a muerte de su madre, apenas son dos meses y yo tampoco la he superado pero no es razón para que metan un extraño a nuestra casa.
Pero papá-esta vez hablo Alice-esto es muy real mi madre esta justo aqui-continuó mientras alzaba la muñeca que cargaba en brazos.
Oh, señor Myrtles usted es un hombre muy escéptico ¿verdad?, yo tengo formas de demostrarle que soy real-habló Jason al momento que los juguetes y peluches empezaron a bajar de la estanteria con una motricidad increible se acercaron a los 3 miembros de la familia y se les quedaron viendo  durante un buen tiempo. Su padre no podía no creer lo que acababa de presenciar aquellos muñecos se movian con motricidad propia por orden de aquel enigmático personaje que se hallaba frente a él.
Me presento-habló el sujeto-mi nombre es Jason y soy el creador de todos estos hermosos juguetes-señalo Jason con un gran movimiento de manos que abarcaba toda la habitación-incluida la muñeca que su hija sostiene en brazos, la cual por cierto es su dulce esposa ¿Cuál era su nombre? Oh,Amy la que por cierto intento matar a su preciosa hija Alice, ahora mi mejor amiga por cierto-le confeso Jason al padre que no comprendió lo que estaba contemplando-ven acercate necesito un abrazo-Jason abrio los brazos para formar un abrazo y los peluches abrieron un camino recto hacia Jason para que Alice pudiera pasar, Alice fue caminando lentamente y con pesadez hacia donde estaba Jason con los brazos abiertos, algo estaba mal, algo no cuadraba dentro de la cabea del Sr. Myrtles su hija no parecia alegre de ir con su "mejor amigo" (según Jason) algo completamente extraño para la seguridad con la que Jason habia hablado, pero a pesar de todo no la detuvo no podia interponerse ante algo tan poderoso como lo aparentaba Jason.
Ella no quiere ir contigo-murmuró Marcus para si debajo de sus dientes apretados tan fuertemente que empezaron a chirrear-¡¡Ella no quiere ir contigo!!-esta vez gritó lo mas fuerte que pudo ante la mirada atónita de su padre que habia estado pensando lo mismo, el chico tenía mas huevos que su padre. Jason no habló ni se movio ante la acusación de Marcus.
Los peluches abrieron otro camino delante de Marcus hasta Jason que se habia empezado a acercar peligrosamente a Marcus como un puma cazando a una presa que sabe, es incapaz de huir.
Hey, pequeño hombre-exclamó Jason con la mirada fija en los ojos vidriosos de Marcus que representaban la mas penosa mirada de valentía falsa que se haya visto antes-porque no vienes aqui y me sostienes este pequeño ratón-Jason extendió su mano hacia Marcus con un pequeño ratón rojizo que cabia a la perfección en la mano del fabricante de juguetes. Marcus se le acerco incapaz de huir de la orden de Jason y tomó el ratoncillo tan rápido como sus musculos le permitieron, Marcus le habia hecho una celda al ratón con ambas manos.
Hubiera preferido que perdieras solo una-una luz sanguinolenta empezo a emanar atravez de sus manos y en un momento el ratón explotó junto con las manos de Marcus que ni siquiera tuvo tiempo para reaccionar.
No paso tanto tiempo hasta que la luz sanguinolenta se convierta en sangre de verdad con pequeños pedazos de carne que antes habian pertenecido a una persona, las manos permanecian intactas delante de los ojos de Marcus que empezó a gritar tan fuerte y desesperadamente que el oido caló hasta lo mas fondo de la cabeza de Alice, el grito se calló de inmediato con el gorgoteo y el sonido morboso de la carne y huesos al romperse, aquel como el de caminar con calcetines mojados, Jason le habia aplastado la cabea con la bota tan fuerte como pudo, solo bastaron dos pisotones, el hueso del craneo permanecia allí en el ambiente que de habia vuelto pesado al instante, su nariz, si es que a una masa de astillas,carne y sangre se le puede llamar de tal forma, permanecia allí; sus ojos habian caido dentro del craneo como un balón que se habia desinflado, la mandibula se habia separado del cráneo y estaba metida a presión en el lugar en el que deberia ir la nariz.