~ღ Μy Lϊττιε Μσηsτεr ღ~

Noche Improvisada II

Narra _____________

No podía creer que Scarleth dijera eso.
Creo que mi cara estaba roja de tanta furia.
Ni siquiera es su casa para que haga una fiesta.
Scarleth me estaba sacando de quicio. Me veía como si hubiera ganado una batalla.
Sentía un fuerte impulso para ir a partirle la cara.

-Oi, ¿te encuentras bien?- Preguntó Haru.
-¿Por qué no lo estaría?- Sonreí retorcidamente.
-Bueno... Para empezar, estás respirando como toro.-
-JAJAJAJA.- Me reí a carcajadas.

No pude evitarlo, en verdad no me esperaba que me dijera algo como eso en este momento. Me hizo mucha gracia.
Pero nuevamente regresó a mí la seriedad y la miré fríamente. A lo lejos, Derek entendía lo que estaba pasando, pero no hacía nada.

-Sabes que...- Crucé mi mirada con la de él.
-Amor, no te pongas así kudasai, es sólo una fiesta improvisada.- Haru me interrumpió. -Y una fiesta que es para celebrarte. Vamos confía en mí, Scarleth no es mala como parece, simplemente tienes que conocerla mejor.-

Aparté mi mirada de la suya y regresé a ver hacia donde Scarleth estaba. Me tomó por sorpresa el hecho de que Derek la estaba regañando (prácticamente).
<<¿Ahora estás de su lado, Haru?>>. Pensé, pero me lo guardé para mí misma.
Yo no sabía qué responder, así que no dije nada antes de decir algo estúpido.

-Además ella es casi tu hermanastra y las dos tienen que aprender a convivir.-

Corrientes escalofriantes recorrieron por mi cuerpo al escuchar eso.
En verdad que me molestaba un poco la idea de tenerla como hermanastra, pero Haru tiene razón, no debo juzgarla antes de tiempo.
<<Que haga una fiesta está bien, pero ¿necesariamente tiene que ser en mi casa?>>.

-Ahh...- Suspiré. -De acuerdo, le daré una oportunidad a esta fiesta.-
-Bien! Mira, lo único que debemos hacer es divertirnos y celebrarte como los dioses.-
-JAJAJA, no seas exagerado.-

Haru me hacía reír a carcajadas (hasta llegar al punto en donde te duele el estómago y te falta la respiración) cada vez que salía con alguna ocurrencia.
En fin, como ya estaba tan decidida, caminé hasta donde Scarleth y Derek estaban. Una sonrisa fingida se dibujó en mi rostro.

-¿Cómo pudiste hacerlo? ¡No es nuestra casa para que decidas eso!-
-Cállate, Derek. Saori dijo que su casa es nuestra casa desde ahora en adelante.-

Ya estaba tan cerca que podía escuchar a Scarleth refutar contra su hermano.

-Scarleth...- Dije con un tono de desagrado en mi voz. -Te agradezco mucho por planificar una fiesta en mi honor.-

Al parecer, ella no esperaba que le dijera eso. Mejor dicho, esperaba gritos de enfado por mi parte, pero no le demostré eso.
Fingió una sonrisa.

-Sí, es tu casa y tú eres la homenajeada.-
-Pero también es la suya, y de hecho me parece una fantástica idea hacer una fiesta, ya era hora, ¿no lo crees?-